Un jurado de Los Angeles decidió el miércoles por unanimidad que el promotor de conciertos AEG Live no fue responsable por la muerte por negligencia de la estrella de la música popular Michael Jackson.
El veredicto, que determinó que el doctor contratado por la empresa no era incompetente para el trabajo, cierra un juicio de cinco meses que ofreció una mirada a la vida privada y los últimos días del cantante.
La madre de Jackson, Katherine, y sus tres hijos demandaron a AEG Live por la muerte del cantante en el 2009 a los 50 años en Los Angeles debido a una sobredosis del somnífero usado en cirugías.
La familia alegó que AEG Live contrató de manera negligente a Conrad Murray como el médico personal de Jackson e ignoró las señales de que la salud del cantante se había deteriorado antes de su muerte.
Murray, que atendía a Jackson mientras el cantante ensayaba para la serie de conciertos “This Is It”, con los que relanzaría su carrera musical, fue condenado por homicidio involuntario en 2011 por administrar el propofol que causó la muerte a la estrella.
Fuente: Reuters