El diseñador Thibaut Gleize ha creado un universo alterno divertidísimo y absurdo donde los perros pueden ser pervertidos exhibicionistas en motonetas o pelucas vivientes para Sylvester Stallone.
En el mundo extraño de Gleize, los osos perezosos usan barniz en las uñas, hombres de galleta se bañan en tazas de chocolate caliente.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.