“Imagínatelo: es el funeral de tu padre y estás arrodillado junto a su ataúd, despidiéndote para siempre de él. De repente, tienes nueve orgasmos. Justo ahí, cuando toda tu familia está de pie detrás de ti”.
Ese es el día a día de Dale Decker, un estadounidense de 37 años que sufre el Síndrome de la Excitación Sexual Persistente (PSAS, por sus siglas en inglés).
Desarrolló el transtorno en el 2012, cuando una tonta caída hizo que se le desplazara una vértebra. Según cuenta, el síndrome le hace tener unos cien orgasmos al día. En el funeral de su padre, en el trabajo, frente a sus hijos… en público y en las situaciones menos oportunas.
“No hay nada de placentero en ello, porque a pesar de sentirte físicamente bien estás completamente a disgusto por lo que está pasando. Hace que no quieras tener un orgasmo nunca más”. dice Decker.
Se ignoran las causas
La sexóloga Francisca Molero señala que “se experimentan todos los cambios genitales pero sin haber tenido la sensación de una excitación previa”. Es decir, aparece una excitación genital sin haber tenido antes un estímulo. “Es como si sensaciones intrusas invadieran el cuerpo y provocasen orgasmos“, explica.
No se conocen las causas, pero las investigaciones apuntan a un amplio abanico de posibilidades: factores neurológicos, vasculares, hormonales o por efectos secundarios de medicamentos. Y el tratamiento más eficaz es la terapia cognitiva-sexual.
No es multiorgasmia
El Síndrome de la Excitación Sexual Persistente no tiene, por lo tanto, nada que ver con la hipersexualidad o el aumento extremo de la líbido, ni con la multiorgasmia.
Esta situación no siempre desemboca en un orgasmo y, aunque lo haga, la sensación no suele desaparecer, explica la sexóloga.
Asimismo, el hecho de percibirse como algo intrusivo, ajeno al propio deseo y por lo tanto negativo puede reforzar e intensificar la respuesta.
Molero lo explica con un paralelismo: “Es como cuando uno tiene un pensamiento desagradable y lo quiere quitar de la cabeza. Cuando más lo intenta más fija su atención en él”.
Con información de BBC