Mucha gente cree que la adicción a sustancias es una enfermedad cuando en realidad es un síntoma de problemas mayores. Por esta misma razón mucha gente con tendencias adictivas piensa que al abstenerse de consumir dicha sustancia se curan mágicamente de su adicción, ya sea por alcohol, drogas, farmacéuticos o lo que fuera.
Hay casos donde la adicción es física y la abstinencia sí es la única forma de curarse, pero en cualquier caso donde la adicción es psicológica, la moderación sería mejor opción. En estos casos de adicción psicológica la gente deja de consumir lo que piensa que es la causa de sus problemas y se dejan llevar con la ilusión de que así se resolverán y muchas veces, sin darse cuenta, siguen con los mismos problemas (si es que no empeoran) y terminan reemplazando su adicción con otro vicio, hecho que ya debería dejar claro al individuo que la sustancia anterior no fue la raíz del problema. Pero mucha gente no se da cuenta de esto y termina cayendo más y más hasta terminar de autodestruirse por completo.
Algo que he notado que no ayuda a la solución de estos problemas son algunos grupos de apoyo. En lugar de buscar cuál es la razón por la cual recurren a los excesos de un mal habito, los hacen pensar que son gente débil, con poca voluntad y vulnerables ante la tentación.
Es problemático cuando estos grupos son religiosos y buscan que Dios les ayude. Hay que respetar las creencias religiosas, pero eso no significa que un ser supremo se va a encargar de solucionarte la vida. La religión puede servir como motivación para salir adelante, pero no sirve para nada como solución. La fe y la acción son dos cosas diferentes y nadie nunca ha solucionado nada en el mundo usando solamente la fe.
Regreso a lo que mencioné antes. Para que un adicto se cure, no basta con que deje la sustancia que le esta generando conflictos, la trampa en la que caen muchos adictos recuperados es esto. Al abstenerse totalmente de la sustancia, le dan cierto poder que no tiene. Con esto me refiero a que un alcohólico (como ejemplo) puede dejar de beber completamente, pero el momento que toque su boca una gota de alcohol, se pierde todo y recae.
A esto es a lo que me refiero cuando digo que la moderación es una mejor solución a estos problemas. Al moderar el consumo, estas tomando control; al abstenerte completamente, le estas cediendo el control al vicio, porque no puedes tenerlo en tu vida sin que se te vaya de las manos.
Para que un adicto retome control sobre su vida, tiene que ponerla en orden. Cumpliendo con esto no tendrá que recurrir a las soluciones temporales y lo que antes era un vicio, puede volverse otra vez uno de esos pequeños gustos en la vida.