Cuando se trata de combatir enfermedades, a tu cuerpo generalmente no le gusta recibir ayuda de terceros. Superar este problema ha sido un gran obstáculo para los científicos que han intentado crear nanorobots médicos.
Pero ahora un equipo en Harvard cree que han desarrollado una especie de disfraz para los nanorobots para que puedan combatir el cáncer.
Esta nueva tecnología crea soportes estructurales hechos con código genético para ponerle una cubierta gruesa al nanodispositivo.
Nanorobots científicos han sido parte de la imaginación de científicos desde el 1959. Investigadores en Harvard le dieron un gran avance a este campo en 2009 cuando William Shih, el autor principal de este estudio, averiguó cómo doblar el ADN en máquinas programables. Lo llamó órigami de ADN.
Shih y su equipo han estado trabajando en crear un disfraz para las nanomáquinas desde el 2012 cuando averiguaron cómo hacer que uno se adhiriera a células de leucemia y linfoma y lograran hacer que se auto-destruyeran.
Para crear el prototipo, el equipo primero tuvo que doblar las piezas de ADN en una figura octaédrica del tamaño de un virus. Luego usaron piezas más pequeñas para construir manijas en el exterior a los cuales les colocaron pedazos de lípidos, crean una delgada membrana .
Llenaron los nanorobots con tinte fluorescente para observarlos y los inyectaron en ratones. Los nanorobots que son atacados por el sistema inmunológico terminan en la pansa. Pero cuando escanearon a los ratones con los nanorobots con la membrana, todo su cuerpo brillaba, indicando que el cuerpo no los estaba combatiendo.
Estas pruebas se llevaron a cabo con robots inertes, por lo tanto no nos asegura que ya existen nanorobots que puedan combatir el cáncer, sino que son una posibilidad cercana. Esto significa que podremos tener sistemas inmunológicos mejorados con estos nanorobotos y le pondría fin a muchas de las peores enfermedades que podemos contraer actualmente.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.
Con información de Quartz.