El presidente boliviano Evo Morales dio hoy por superado el conflicto con España por el “caso Snowden”, después de que en julio pasado se le impidió sobrevolar el espacio aéreo de varios países europeos, y pidió “dejar eso en el pasado”.

El mandatario boliviano realizó este martes una escala en Madrid, como parte de su viaje de esta semana a Bielorrusia e Italia (donde se entrevistará con el Papa Francisco), y se entrevistó con el rey Juan Carlos y con el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy.

En julio pasado, España fue uno de los países señalados de obstaculizar el viaje que Morales realizaba de Rusia a Bolivia, por la sospecha de que en su avión viajaba escondido el ex analista estadunidense Edward Snowden.

La negativa de varios países europeos a que el avión de Morales volara por su espacio aéreo obligó a realizar una prolongada escala en Viena, Austria, donde se le permitió aterrizar de emergencia, lo que generó protestas de Bolivia y de otros países latinoamericanos.

“El tema de Snowden quiero dejarlo superado, relanzar la amistad y confianza con el gobierno de España y con todos los gobiernos europeos. Ya dijimos que algunos agentes externos quisieron enfrentarnos con los europeos, y no van a poder”, aseguró.

“No guardo rencor ni resentimiento, las familias indígenas no somos rencorosas. Después de escuchar las versiones de los países europeos esto está superado, y con este encuentro (con el rey y con Rajoy) ratifico la relación con España”, expresó Morales.

Explicó que en su encuentro con el mandatario español no se hicieron preguntas específicas de este tema, porque ya las cancillerías de ambos países habían dialogado, por lo que llegó a Madrid dando por superado el problema.

“Me dijo, aquí tienes un presidente amigo, un gobierno amigo, y que en la prioridad de la cooperación española está Bolivia”, aseveró.

Al preguntarle sobre el papel del embajador de España en Austria, quien presuntamente se habría presentado en el aeropuerto de Viena -donde Morales aterrizó de urgencia- para revisar su avión, el mandatario boliviano respondió que no sabe qué pasó.

“Lo pasado pisado, como decimos en Bolivia. Estoy casi convencido que agentes externos quisieron enfrentarnos entre Bolivia y España, Francia e Italia, para crear desconfianza, y ante ello se ha tomado las cosas con madurez”, enfatizó.

“Ustedes saben mejor que yo de dónde viene esto, quizá mi culpa es ser indígena y antiimperialista, pero no vamos a repetir este tema, no estamos resentidos, nos somos vengativos, ya pasó y lo importante es trabajar por el conjunto del pueblo boliviano”, abundó.

“Con Rajoy hablé de la agenda de los dos países, porque por encima de las diferencias de carácter programático, ideológico y cultural, somos presidentes electos por los pueblos, y las relaciones diplomáticas y de trabajo siempre serán con mucho respeto”, apuntó.

Morales comentó que en relación a la presencia de empresas españolas en sectores estratégicos de su país, el 99 por ciento cumple con sus contratos y son socios del Estado, y sólo unas pocas han tenido problemas.

Recalcó que son muchas las empresas que están en diferentes proyectos, como carreteras y energía, y sólo con una compañía vinculada a la gestión de aeropuertos se presentó un problema, el cual fue tratado entre los dos gobiernos.

Tras su escala en esta capital, el presidente boliviano viajará mañana miércoles a Bielorrusia, para después seguir su gira en Italia, donde permanecerá el jueves y viernes.