Si alguna vez has estado de malas o te ha dolido la cabeza después de dejar de comer chatarra, un estudio reciente dice que seguro fue síndrome de abstinencia.

El estudio concluyó que aquellos que dejaron de comer alimentos altamente procesados, como papas o galletas, experimentaron síntomas del síndrome de abstinencia psicológico similares a los que uno siente cuando deja de fumar.

Síntomas como cambio de estado de ánimo, antojos, ansiedad, dolor de cabeza y mala calidad de sueño se presentan. Los investigadores observaron que los síntomas eran más intensos entre dos a cinco días después de dejar la chatarra.

Para el estudio los investigadores le pidieron a 200 personas que siguieron una dieta dentro del último año que respondieran un cuestionario.

La investigadora principal, Erica Schulte, dice que la comida altamente procesada, que suele contener cantidades excesivas de sal o de azúcar, puede ser adictiva.

Sin embargo, el estudio tiene sus fallas. A los participantes se les pidió recordar sus síntomas, así que existe la posibilidad de que no todos recuerden bien los detalles. Además, el estudio no observó la intensidad de la abstinencia o si los participantes dejaron de comer chatarra completamente o simplemente redujeron su consumo.

Sin embargo, los investigadores creen que es un buen punto de partida para estudios futuros que busquen investigar la adicción hacia los alimentos.

Claro, hacer dieta nunca es fácil, pero cambiar el refresco por agua, preparar tus almuerzos por adelantado y llevar a cabo alguna actividad física todos los días ayuda mucho a bajar de peso.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.