Por: Lucero Gómez
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) pidió a las autoridades del Estado de Michoacán intensificar las investigaciones para encontrar a los responsables de la desaparición del sacerdote, Santiago Álvarez Figueroa, de la diócesis de Zamora, Michoacán.

Mediante un comunicado, la Diócesis de Zamora explicó que el sacerdote desapareció el pasado 27 de diciembre cuando se dirigía en automóvil desde Jacona hasta Paredones, cerca de la ciudad de Jiquilpan, pero nunca llegó a su casa, donde los esperaban sus papás y sus hermanos. Al tomar el camino, hizo una llamada telefónica alrededor de las nueve de la noche a una religiosa, siendo el último contacto que se sabe que realizó.

Así mismo denunciaron que la investigación que inició el 29 de diciembre, fecha en la que se presentó la denuncia en la Subprocuraduría Regional de Justicia de Zamora, ha sido «infructuosa» para encontrar al sacerdote mexicano: «Hasta el día de hoy nada sabemos sobre este hermano nuestro Sacerdote que tanta falta nos hace como servidor de Dios y del pueblo. Nadie lo ha visto a él; nadie ha visto su carro» se afirma en el escrito.

Los obispos mexicanos lanzaron un llamado a los involucrados en este caso: «A quienes son responsables de la desaparición del Padre Santiago les pedimos: ¡Por amor de Dios devuelvan sano un hijo a su madre; un hermano a sus hermanos; un sacerdote a la comunidad; un promotor vocacional a los adolescentes y jóvenes!»