Hay detalles que hacen que un hombre nos deje de interesar, ya sea de manera consciente o inconsciente. Aquí algunos de ellos:
- Zapatos. La mayoría de las mujeres no toleran que los hombres usen los mismos zapatos siempre y además ¡que estén sucios! Y es que para muchas es un sinónimo de que les apestan los pies.
- Panza. Difícilmente nos fijaremos en un hombre con pancita… y entre más grande, será más difícil. Lamentablemente a la mayoría de los hombres no les importa el tamaño de su abdomen, hasta que quieren ligar.
- Pelos en la nariz, orejas y cejas. Les dan una apariencia desagradable, que los hace lucir desaliñados y con más años.
- Manos. Aunque ellos puedan pensar que unas manos llenas de callos son varoniles, para nosotras no lo son tanto. Cuidar las uñas también es importante por qué ¿a quién le gusta la uña larga del meñique para limpiar las orejas?
- Barba y bigote. No nos referimos a que no nos gusten, -aunque hay a quien no-; pero en general a las mujeres no nos gusta que no cuiden de su barba y/o bigote. Deben recortarla, peinarla y arreglarla.
- Vellos en la espalda. Aunque el pelo en pecho no es desagradable -para la mayoría de nosotras- el vello en la espalda es sumamente desagradable.
- Dientes. Definitivamente una mala higiene bucal aleja a cualquiera… seas hombre o mujer.
- Pies. Muchas personas aseguran que las mujeres relacionados la salud e higiene de los hombres con su zona íntima, así que una mala presentación no terminará en nada.
- Comida. A pesar de que sabemos que los hombres comen mucho, es la manera en la que lo hacen la que puede afectar lo que sentimos por ellos.