El presidente de México, Enrique Peña Nieto, ordenó la destitución del director de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Humberto Benítez Treviño, por un escándalo en el que se vio involucrada su hija.

El anuncio fue hecho por el Secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, quien dijo que, aunque el titular de Profeco no tiene responsabilidad administrativa en lo sucedido, el caso dañó la imagen de la procuraduría.

Como se informó, el viernes 26 de abril la joven Andrea Benítez llegó a un restaurante de la Colonia Roma, en Ciudad de México, y al considerar que no había sido atendida con rapidez hizo que funcionarios de la procuraduría cerraran el lugar por algunas horas.

Juan Carlos Pérez Salazar, corresponsal de BBC Mundo en México indicó que, cuando el hecho trascendió a los medios, se desató un verdadero escándalo y el incidente se volvió muy popular en twitter bajo el hashtag“#LadyProfeco”.

[sws_green_box box_size=”580″] Disculpas [/sws_green_box]

Humberto Benítez pidió disculpas dos días después, también por Twitter, donde dijo: “Mi sincera disculpa por la conducta inapropiada de mi hija y la sobrerreacción de los verificadores de @Profeco. Privilegio sólo para la ley”.

La propia joven, aunque insistió en que no había sido bien atendida, pidió perdón por el mismo medio: “Quiero ofrecer disculpas a quienes fueron incomodados el pasado viernes en @MaximoBistrot me siento muy apenada por lo que pasó.” Luego volvió privada su cuenta de Twitter.

Días después fueron destituidos cuatro funcionarios involucrados directamente con el hecho.

Sin embargo, el escándalo no disminuyó y ahora el director de Profeco paga con su puesto los excesos de su hija.

BBC