John Bailey, profesor investigador de la Universidad de Georgetown, en Washington, estimó que ingresan a la economía mexicana entre 6 mil y 15 mil millones de dólares anuales como producto de actividades ilegales como el narcotráfico. Esta cifra, dijo, es un cocktail que representa fuga de capitales y evasión fiscal.

Por ello, dijo, es necesario homologar el código federal de procedimientos penales a nivel nacional en materia de combate al lavado de dinero y delincuencia organizada. Adicionalmente, comentó que es necesario que los bancos avancen en el conocimiento de sus clientes para determinar cualquier comportamiento anormal dentro de sus operaciones financieras regulares.

En conferencia de prensa organizada por la Asociación de Bancos de México, el profesor investigador de la Universidad de Georgetown señaló que debido a que en México se sigue utilizando el efectivo, hay muchos canales para lavar dinero.

Futbol, uno de los medios para blanquear capitales

Consideró que el futbol es un mecanismo por medio del cual se pueden blanquear capitales al declarar cifras que no corresponden a los montos reales que se pagan por la carta de algún jugador.

Aseguró que constituyen «un mito urbano» las cifras que señalan que en México entran hasta 29 mil millones de dólares anuales producto del narcotrafico. «Es exagerada esta cifra», porque el monto de dólares legales que circulan en la economía mexicana es de alrededor de 40 mil millones, refirió.

Manifestó que uno de los desafíos más importantes en materia de seguridad es atraer a la economía informal al sector formal y controlar al sector criminal. Pero reconoció que si México se blinda, entonces las operaciones se van a ir a Panamá o Ecuador.

Para ello, se preguntó: ¿Son demonios enormes o simples? Respondió: «En mi opinión es que son demonios muy significativos», aunque en México no se ha logrado determinar que haya una relación entre el crimen organizado y el terrorismo.

En torno al fenómeno de la economía informal o subterránea, el académico mencionó que fomenta la corrupción y la criminalidad y estimula redes internacionales del crimen. Entre los mercados relevantes en la informalidad destacan los de autopartes robadas, tabacos, licores y medicinas, entre otras.

Fuente: Vanguardia