Los poros en la nariz son de los más grandes en tu cara, lo cual aumenta la posibilidad de que se tapen. El sebo y las células muertas de piel se atoran fácilmente en estos poros y se vuelven negros porque contienen melanina. Tras larga exposición al oxígeno, las células de piel muertas se vuelven negras.
Conforme envejeces tus poros se expanden y aumenta la producción de sebo. Estas son las condiciones perfectas para los puntos negros, especialmente en la nariz.
Pero no te los quites al apretar la piel y exprimirlos, esto sólo irritará tu piel y puede dejar cicatriz.
Por suerte, serán bien comunes los puntos negros, pero también son la forma más leve de acné. Son tan superficiales que casi no causan inflamación y son menos severos al ser expuestos.
¿Y qué hacer para quitar y prevenir los puntos negros?
- Exfoliate todas las noches con un producto que contenga un exfoliador químico como ácido glicólico o salicílico. Sonará riesgoso pero no tienes que preocuparte, simplemente disuelven las células de piel muertas y el exceso de sebo. No uses un exfoliador físico.
- Seca tu piel y aplica una crema de retinol antes de dormir. Esto expulsará el contenido de los puntos negros. Procura lavarte bien la cara en la mañana ya que el retinol puede sensibilizar la piel.
- Finalmente, aplica una mascarilla de carbón a la cara limpia una o dos veces a la semana. La arcilla se une al sebo y la piel muerta en los poros y los extrae cuando te quitas la mascarilla.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.