Nadie en realidad sabe bien cómo contratar. Tal vez será mejor idea trabajar en todo lo demás.

Muchísima gente cree que son buenísimos para contratar a buenos empleados. Hablan de los genios que encontraron y de las carreras que hicieron crecer, pero rara vez pueden recordar las malas elecciones sin ayuda.

A esto se le llama sesgo de afirmación. Significa que podemos recordar con perfecta claridad nuestras decisiones inteligentes pero borramos sutilmente de nuestras memorias las malas decisiones y errores que cometemos. Pero cuando se trata de contratar a empleados, la evidencia sugiere que en realidad nadie sabe nada de cómo contratar a nuevos empleados. Cuando Google recopiló cantidades masivas de datos tratándose de contratar no pudieron identificar ningún proceso, individuo, ninguna serie de preguntas ni interrogatorios que hayan generado un número excepcional de buenas contrataciones.

Sabemos qué es lo que no funciona: desafíos intricados, acertijos, resultados de exámenes. Nada de esto te revelará algo importante. Siendo consistente con preguntas de entrevista ayuda al igual que preguntas sobre comportamientos que piden evidencias de cómo un candidato ha actuado en circunstancias particulares. Pero la idea de que hay gente que simplemente con ver a alguien ya saben que es un buen empleado es una tontería. Todos padecemos de prejuicios inconscientes y siempre vamos a preferir contratar a alguien que se parezca a nosotros.

Muchos empresarios se preocupan del desempeño de sus empleados. Su mayor preocupación es cómo sacarle el mayor provecho a los empleados correctos. Estas son unas formas de conseguir esto adecuadamente:

  • Si no puedes contratar bien, aprende a despedir bien. Hay buenas formas y malas de despedir a la gente. La forma más convencional es rápido, brutal y desagradable. Cuando tienes tienes que despedir a alguien, a menudo es porque todos estaban cometiendo errores. Entonces haz el proceso algo digno. Reconoce el error por ambas partes y haz tu meta dejar a todos los involucrados con respeto mutuo.
  • Mete periodos de prueba más largos. El responsable de contratación y el nuevo empleado necesitan tiempo para conocerse. Mete este tiempo al acuerdo para que ambos puedan decidir si quedan bien o no. Esta libertad la tienen que tener ambos para que nadie sienta miedo ni que lo estén explotando.
  • Usa una grande gama de entrevistadores por separado. Hacer entrevistas en grupo casi te puede garantizar para generar un pensamiento en grupo y genera un sesgo. En lugar, que los candidatos conozcan a varias personas en el negocio y se hace un acuerdo al fiinal.
  • Haz tiempo para construir un equipo. La mayoría de las empresas, especialmente las pequeñas, contratan a gente nueva, los ponen a trabajar y esperan que lo demás se desarrolle solito. Pero en muchas oficinas muy ocupadas esto significa que hay bien poquito tiempo para conocerse lo cual como consecuencia significa que habrán menos posibilidades para aprender juntos y crear confianza.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.