A la hora de enfrentarnos a una entrevista de trabajo es importante cumplir con el perfil que están buscando, pero existen ciertas habilidades que debes tener si quieres asegurarte el puesto. Estas competencias marcan la diferencia a la hora de elegir entre un candidato u otro. En la web especializada en empleo Jobandtalent nos descubren cuáles son:

1. Dominar las nuevas tecnologías: es una de las habilidades más básicas y, por lo tanto, necesarias. Son aplicables a todos los trabajos y deben formar parte de nosotros casi a la perfección.

2. Trabajar en equipo: pocas veces acudirás a una entrevista de trabajo en la que no te pregunten por ello. Las empresas suelen organizar a sus trabajadores en grupos para potenciar lo mejor de unos y de otros, así que estará en tu mano demostrar que eres capaz de compenetrarte con otros compañeros a la hora de trabajar.

3. Capacidad de reacción y flexibilidad: para una empresa es importante saber si su empleado es capaz de afrontar problemas imprevistos o cambios de horarios puntuales. Se trata de ser flexible y adaptarse a la realidad tal y como se presente.

4. Iniciativa: de poco sirve ser una persona que cumple ordenes y se limita a hacer su trabajo si no le pone ni pasión ni ilusión. El entrevistador valorará que seas una persona activa con ganas de aprender y evolucionar porque ello tendrá resultados positivos para la empresa.

5. Eficacia: es importante que un empleado sea capaz de trabajar bajo presión cuando sea necesario. La rapidez a la hora de resolver un problema y la eficiencia siempre serán positivas.

6. Especialización: a una entrevista de trabajo acudirán varios candidatos que compartirán al menos el 50% de su perfil. Tener una carrera ya no basta, es necesario diferenciarse de los demás mediante a especialización. La empresa valorará que tengas conocimientos concretos sobre determinados asuntos que otros desconocen.

7. Idiomas: ni que decir tiene que se han convertido en un requisito imprescindible a la hora de optar a un puesto de trabajo. De hecho, tener dos idiomas ya no es algo que sorprenda a las empresas. Además del castellano y del inglés, intenta controlar otros idiomas como el francés, el alemán o el chino.

(Forbes)