Debajo del mar, este dron sobrevivió un mes, luego dos. El agua salada no lo afectó, simplemente esperaba el momento que alguien lo activara. Luego, al presionar un botón desde una locación remota, emergió del agua y voló por los cielos.
Se llaman CRACUNS, un dron sumergible diseñado para abarcar el territorio marino tanto como el aéreo. Partes son impresas tridimensionalmente para crear un cuerpo hermético y otras partes estaban cubiertas de un sellador para mantener el agua fuera de sus motores.
En sus pruebas duró alrededor de dos meses debajo del agua y aún podía volar por los cielos después. Existen muchas posibilidades para un dron como este, sólo ve este video para entender por qué el Pentágono está muy interesado en este proyecto.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.