Cuando una tormenta se avecina, con frecuencia uno deja la casa para buscar un lugar seguro en lo que pasa. O digamos que simplemente te vas de vacaciones por un rato.

Pero si te preocupa la comida en tu refrigerador que se eche a perder antes de que vuelvas, este pequeño truco funciona de maravilla.

Si se va la luz de tu casa mientras no estás, todo en tu refrigerador, desde la carne hasta la leche, corre riesgo. Pero si la luz vuelve antes que tú, puede que nunca te des cuenta que la luz se fue en algún momento y todo se derritió o echó a perder mientras no estabas.

Lo único que necesitas para evitar esto es un vaso de agua y una moneda. Sólo metes el vaso al congelador y hasta que se vuelva hielo el agua. Luego lo sacas, le pones la moneda encima y dejas el vaso dentro del refrigerador.

Puede que no le veas mucho sentido a esto, pero si la luz se fue por un tiempo considerable, ya sea mientras no estabas o mientras dormías, cuando veas el vaso con la moneda, notarás que la moneda ya no está en la superfice. Así sabrás que tu comida se pudo haber echado a perder. Si la moneda está hasta el fondo, significa que el hielo tuvo suficiente tiempo para derretirse completamente, lo cual es el tiempo suficiente para que se eche a perder tu comida.

Recuerda que es mejor tirar la comida que correr el riesgo y enfermarte.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.