Si hay una cosa que tenemos en común con los gatos es que ambos necesitamos nuestro espacio vital, o nuestro espacio personal, como le quieras decir. Esto es apróximadamente el espacio que te rodea que se extiende a lo largo de lo que puedes alcanzar con los brazos.

Tener a alguien dentro de este espacio es una invasión de tu privacidad y tu comodidad. Pero otra cosa que algunas personas tenemos en común con los gatos y no respetamos este espacio. Ahora estos gatos saben lo que es tener a alguien pegado en tu cara cuando no es el momento:14956646_1800757896641485_5941426763882839189_n 15179168_1800757866641488_546945493122987240_n 15181385_1800757819974826_1450929432900147096_n 15202676_1800758053308136_1927826360385504498_n 15202699_1800758049974803_5549366906483384106_n 15202732_1800757856641489_6567859779851712069_n 15203267_1800757986641476_7756349462275876011_n 15230610_1800757823308159_7599112176263389442_n 15230749_1800757776641497_1393900025891027067_n 15241139_1800757909974817_1047153669410645104_n 15253630_1800757816641493_4429586987628326674_n 15267749_1800757773308164_579374477358267598_n 15283983_1800757769974831_2431237593797912712_n 15284076_1800758063308135_6047992294979164966_n

Publicado por Othón Vélez O’Brien.

Category: Fun