El gobierno de Corea del Sur “exigió enérgicamente” a su vecino del Norte que garantice la seguridad de nueve desertores que fueron forzados a regresar a Pyongyang la semana pasada.
El portavoz de la cancillería surcoreana, Cho Tae-young, describió la repatriación de los nueve norcoreanos presuntamente huérfanos, de entre 14 y 18 años de edad, como “muy lamentable”, reportó la agencia informativa Yonhap.
Los norcoreanos fueron detenidos en Laos el 10 de mayo por cruzar ilegalmente la frontera, después fueron enviado a China y el pasado 27 de mayo se les expulsó a China.
Un día después se procedió a su deportación a Norcorea, aseguró Seúl, que teme que podrían enfrentar castigos e incluso la ejecución.
Corea del Sur planteará este asunto en la reunión de una agencia de la ONU sobre los derechos humanos, que se celebrará en Ginebra esta semana, añadió el portavoz Cho.
El ministerio chino de Asuntos Exteriores expresó ayer su extrañeza al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) por haber criticado a China y Laos a causa de la repatriación de los norcoreanos.
El portavoz de la cancillería, Hong Lei, aseguró a los periodistas que su gobierno no había recibido ninguna petición de ningún país en relación con los norcoreanos y confirmó que los desertores habían sido deportados.
Este incidente se suma a la prolongada crisis en la relación entre ambas naciones que en fecha reciente se ha incrementado ante las reiteradas provocaciones de Pyongyang contra Seúl y Washington.
Tokio, 4 Jun (Notimex).