El cantante español Miguel Bosé fascinó a unas 100 mil personas en el Zócalo de esta ciudad, al ofrecer un concierto compuesto por varios de sus éxitos a lo largo de sus 37 años de carrera.
El astro de la música, uno de los más reconocidos en el habla hispana a nivel mundial interpretó, como parte de su tour “Papitwo”, un total de 26 temas durante dos horas y media con dedicatoria especial para las madres, quienes celebraron su día el pasado 10 de mayo y envió un mensaje de paz y libertad.
A las 20:30 horas de este domingo se levantó una cortina de tela montada en el escenario para descubrir la figura del “Papito” acompañado de cinco músicos y tres coristas, quienes a ritmo del tema “Mirarte” caminaban en círculo sobre el templete.
Para entonces, según el reporte de Protección Civil y Seguridad Pública, había unas 60 mil personas en la Plaza de la Constitución que coreaban a todo pulmón dos de sus grandes éxitos: “Duende” y “Nena”.
“Buenas noches, México, desde aquí en la primera fila hasta el fondo de las calles”, expresó Bosé a manera de bienvenida aunque después interrumpió su saludo para solicitar a quienes le apuntaban con luces tipo láser dejaran de hacerlo porque le resultaba molesto.
“Esta noche estamos aquí para seguir celebrando el Día de las Madres. Mucha felicidad a todas las mamás que estén aquí o que estén afuera viéndonos”, dijó el interprete.
“También vamos a celebrar algo que hemos construido todos y cada uno de ustedes, nada más y nada menos que 37 años de música. Gracias por todo, porque sin vosotros yo jamás podría estar aquí haciendo lo que más me gusta en la vida, que es la música, gracias” declaró emocionado.
“Vamos a celebrarlo con mucha magia, abran bien sus oídos, sus ojos, sus corazones, sus almas, sus piernas, lo que querais, pero dejadnos entrar, México”, resaltó Bosé.
Acto seguido, los suaves acordes de “Aire soy” cimbraron en cada rincón del primer cuadro del Centro Histórico y Ximena Sariñana apareció frente a las miles de personas para cantar a dueto la canción, aunque esta vez respetando el correcto uso del idioma en la frase “casi sin querer”.
Tras sellar su participación con un beso y un abrazo, Ximena se retiró y Miguel Bosé dio paso a “Sol forastero” para luego levantar su voz en contra de las guerras y en favor de la paz.
“Vamos a cambiar de tema para ir a una zona un tanto espinosa, pero que nos toca a todos y a cada uno de los hombres, México, por si no lo sabes, yo soy un hombre de paz y quiero que la paz sea incluida en los derechos universales y primordiales para el hombre” confesó.
“Estamos todos los días peleando por ellos, básicamente por una razón, pues quiero que mis hijos crezcan en un mundo donde no haya conflictos, donde todos seamos seres humanos, porque la guerra es un juguete que el hombre inventa y que no sirve para nada”, mencionó.
Con la confianza de que algún día su repertorio de canciones que apunta hacia este renglón sea un caso obsoleto, Bosé entregó “Partisano” acerca de un joven de 17 años que desde la trinchera se despide de sus padres.
“Olvídame tú” marcó el primer momento romántico de la noche, mientras que desde las ventanas y balcones de Palacio Nacional, el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el Edificio de Gobierno y los hoteles aledaños había decenas de personas observando cada detalle del “show” que se prolongó hasta las 22:50 horas.
Sobre el escenario colocado frente a la majestuosa Catedral Metropolitana, el artista presentó “Gulliver” y después, como bien lo dijo, abrió un paréntesis en el tiempo para viajar 37 años atrás, al inicio de su carrera.
“Vamos a hacer un ejercicio para recordar todas esas canciones que tienen tanto tiempo; vamos a abrir las cajas y ver cómo salen emociones porque la música es probablemente la única cosa con la capacidad de memorizar todo lo que sucede alrededor”.
“Bien, abramos esa caja y dejemos salir todo eso, démosle las gracias por tantos años de buenas cosas y recuerdos”, propuso a sus fans.
En sesión acústica y sentado en una banca al lado de sus músicos y coristas compartió los emblemáticos “Te diré”, “Morir de amor”, “Don diablo”, “Creo en ti” y “Amiga”, que dedicó a la fallecida Jenni Rivera al dirigir su dedo hacia el firmamento.
Luego de cantar con los ojos cerrados y concentrado en entregar a la llamada “Diva de la banda” el corazón a través de cada palabra, Bosé interpretó “Linda” y “Puede que”.
Con excelente calidad de sonido e imágenes proyectadas en una megapantalla de LED, en sincronía con el juego de luces, el español deleitó con “Sevilla” y luego de preguntar a la gente: “México, ¿qué quieres que te de?”, puso a bailar a todos los asistentes con “Bambú”.
Miguel Bosé de nuevo reflexionó, ahora acerca de la solidaridad, sobre cientos y miles de personas que por razones bélicas cada mes deben dejar sus casas atrás para irse a otro lugar a fin de comenzar una vida nueva.
Con “Nada particular” enmarcó sus palabras mientras se mostraban imágenes de la guerra. Con las palmas arriba, al compás de las estrofas y después moviendo los brazos de un lado a otro como una señal de paz, el público se le entregó de manera incondicional.
“Lláma la libertad y que nunca te la quiten México”, declaró; ante la petición de una más por parte de las 100 mil personas que abarrotaban la plancha del Zócalo, regresó con “Morena mía”.
Con absoluta energía, entusiasmo, dueño del escenario y elegante, Bosé logró que miles de gargantas corearan “Hacer por hacer” y después “Como un lobo”.
De entre los detalles que llamaron la atención de la gente fueron las coreografías que realiza en conjunto con sus músicos y coristas, ya que Bosé lo mismo puede estar en una esquina como en medio del escenario o detrás de la fila, con lo cual hace constar una vez más su sencillez.
Ante el segundo intento de despedida y el coro unánime de “Ole, ole, ole Bosé, Bosé”, el astro regresó una vez más para complacer con “Si tú no vuelves”, “Estuve a punto de” y “Amante bandido”, con la cual logró cautivar a través de su baile sensual a cientos de mujeres.
“México, siempre seré tu héroe de amor y estaré de vuelta siempre que tu quieras, nunca nos dejaremos México” expresó.
De nueva cuenta intentó irse: “Una más, no queremos irnos esta noche es para llevarnos todo esto en los ojos y en los oídos. Pase lo que pase nunca jamás los abandonare. México, te amaré” para continuar con ese tema seguido de “Por ti”.
“Hasta siempre México, gracias por todo, te quiero. Estoy aquí por ti, buenas noches, hasta siempre”, finalizó.
México, 13 May. (Notimex).