El filólogo español Francisco Rico recibió el premio “Alfonso Reyes” 2013, que otorga El Colegio de México, en el marco de la serie de festejos por el 75 aniversario de esa institución.
Al dictar la conferencia magistral “Un aprendiz en El Colegio”, el galardonado contó con alegorías que cuando tenía alrededor de 22 años de edad, compró en ganga toda la nueva Revista de Filología Hispánica, hasta el año 1964.
“La vi página por página, y como una revista es una miscelánea con muchas cosas de los grandes autores, ahí aprendí lo que es la filología”. explicó.
Antes, los académicos Margit Frenk y Aurelio González fueron los encargados de hacer la presentación formal del premiado, quien lo mismo fue requerido para tomarse una foto del recuerdo que para emitir algunas palabras sobre los temas que a él le apasionan, inmersos todos en la filología latina.
Las palabras de Rico fueron amenas y anecdóticas, para deleite de los presentes en la Sala Alfonso Reyes dentro de las instalaciones de El Colegio de México, donde el clima cálido de los invitados y personalidades de las letras, el arte y la cultura contrastó con las bajas temperaturas que prevalecieron fuera.
Dicho premio, se informó, fue creado y otorgado en 2010 al doctor Luis Villoro y en 2011 al poeta y traductor José Emilio Pacheco. Es concedido por el Fondo Patrimonial de El Colegio de México que encabeza Jaime Serra Puche y que hoy fue entregado durante una emotiva ceremonia presidida por el director de la institución, Javier Garciadiego.
Francisco Rico es catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona y miembro de la Real Academia Española desde 1986, así como de la British Academy desde 1992.
Entre otras funciones ha dirigido la edición del Instituto Cervantes de “El Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes, así como la colección “Historia y crítica de la literatura española”, de nueve volúmenes.
En entrevista con Notimex, en el marco de la celebración de su premio, el galardonado lamentó: “Hoy se está dando un problema de la sociedad, al menos en la europea. Con los recortes en la enseñanza, el desempleo extraordinario sobre todo entre los jóvenes, se ha acabado la enseñanza de la filología en escuelas e institutos; hoy, la formación del filólogo es meritoria”.
De tal forma, añadió, “qué porvenir les puedo yo ofrecer a mis alumnos, si la formación de filólogos es muy meritoria y quien tiene esa vocación no es más que un mártir”.
Sin que se empañara la felicidad que ha acompañado a Francisco Rico en los últimos días, a raíz del anuncio del premio, sí expresó lo anterior sin poder ocultar un mohín de desencanto ante el negro futuro de la filología.
México, 4 Sep. (Notimex).