Holanda anunció hoy el inicio de un proceso de arbitraje contra Rusia, basado en tratados sobre el Derecho del Mar, para conseguir la liberación de los activistas del rompehielos «Arctic Sunrise» de Greenpeace, detenidos en ese país.
El portavoz del Ministerio holandés de Asuntos Exteriores, Friso Wijnen, confirmó a Efe que el responsable de la cartera, Frans Timmermans, ha iniciado el proceso, que implica que ambos Estados nombren representantes para intentar solucionar el conflicto.
Si las partes no llegan a un acuerdo en el plazo de dos semanas, Holanda acudirá al Tribunal Internacional del Derecho del Mar, con sede en Hamburgo (Alemania).
En una carta enviada al Parlamento, Timmermans aseguró que los pasos jurídicos iniciados por Holanda no suponen la ruptura de las relaciones bilaterales entre ambos países.
Holanda considera que el arresto y la captura del barco han sido irregulares y no comparte la visión de Rusia de que se produjo en una zona exclusiva de explotación económica.
Los miembros de Greenpeace fueron detenidos en septiembre pasado mientras organizaban una acción de protesta en una plataforma petrolífera en el Ártico ruso, con lo cual, según Moscú, violaron leyes internacionales.
Entre los 30 activistas detenidos a bordo del rompehielos de Greenpeace «Arctic Sunrise» hay dos argentinos y dos holandeses, mientras que el resto son de otras 16 nacionalidades.
La embarcación navegaba con pabellón neerlandés cuando guardacostas rusos la pusieron bajo arresto y la remolcaron hasta el puerto de Múrsmansk.
Los activistas han permanecido detenidos a la espera de que se celebre su juicio, aunque es incierto cuántos de ellos han sido acusados de piratería.
El portavoz holandés señaló que el arbitraje no incluye la acusación por piratería, que está basada en el Derecho nacional ruso.
Wijnen indicó además que los dos ecologistas holandeses cuentan con asistencia del consulado, que está en contacto con los abogados, informa a las familias y les proporciona medicinas en caso de ser necesario.
Rusia no ha obstaculizado la asistencia consular», indicó el portavoz de Asuntos Exteriores.
El Gobierno holandés ha exigido la liberación «inmediata» de los activistas y Timmermans ha abordado la problemática del caso con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.
Holanda ha solicitado a Moscú que aclare las razones del apresamiento del barco y los cargos contra los activistas.
El portavoz de Greenpeace en Amsterdam, Jelko de Ruyter, dijo recientemente que el presidente ruso, Vladímir Putin, reconoció durante la celebración del Foro Ártico que los activistas no estaban acusados de piratería, como en un principio dijo el Comité de Investigación ruso.