En un principio era el 9 de mayo, luego el 8 de agosto y por último ahora quedó establecido el 31 de julio como el Día Internacional del Orgasmo, puntualizándolo en su versión femenina.
Usualmente cuando una pareja está en pleno acto sexual, ambos intentan llegar al orgasmo, la culminación del placer sexual que no dura más de doce segundos. En el caso de los hombres resulta fácil alcanzarlo, pero las mujeres suelen tener mayores dificultades.
A nivel mundial, sólo un 35 por ciento de ellas declara experimentar al menos un orgasmo en cada encuentro sexual. Sin embargo, todas pueden tener varios consecutivos.
Existen 7 tipos de orgasmos femeninos:
►Orgasmo Clitorial: En la zona donde se unen los labios menores se encuentra el clítoris, principal órgano de placer de las mujeres. El clítoris tiene, aproximadamente, el mismo número de terminaciones nerviosas que el pene; sin embargo, la penetración vaginal no suele ser suficiente; por ello la forma oral o por medio del tacto pueden ayudar a su estimulación.
►Orgasmo vaginal: Este tipo de placer es poco común. Para obtener este placer suele influir el tamaño y grosor del pene ya que mientras más enérgica sea la penetración es más fácil estimular el útero y la cerviz.
►Orgasmo anal: Para alcanzar este tipo de placer se debe tener en cuenta que se requiere de muchos juegos previos, relajación y lubricante.
►Punto G: Al estimular esta área rugosa, ubicada en la pared frontal de la vagina, se puede llegar a profundos e intensos orgasmos.
►Punto U: Aunque muchos no lo crean, a través del tracto urinario se puede obtener un orgasmo. La mejor forma es hacerlo mediante técnica manual.
►Orgasmo en senos: Los senos y los pezones son un punto de gran excitación.
►Orgasmo mental: En 1992, un grupo de investigadores realizaron un experimento en el que demostraron que el “orgasmo mental” motiva el incremento de presión sanguínea, acelera el corazón y se dilatan las pupilas.
Vía Diario Uno