En teoría, los huevos duros son una de las cosas más fáciles que puedes preparar en la cocina. Pero de la misma manera, también es increíblemente fácil arruinarlos. Si te pasas de tiempo, la yema se vuelve verde, si los preparas con la temperatura demasiado alta, las claras se vuelven como hule. Si no los hierbes suficiente, la yema se volverá aguada.

Ahorrate problemas y sigue estos pasos para preparar huevos duros con cada intento.

Cómo preparar un huevo duro

  1. Pon los huevos en una cacerola con suficiente agua como para cubrir los huevos.
  2. Pon a hervir el agua a temperatura media.
  3. Quita de la flama con la cacerola tapada
  4. Déjalos por 12 minutos, para huevos más cremosos espera sólo 10.
  5. Escurre y transfiere los huevos a un tazón con agua fría con hielos hasta que estén suficientemente fríos como para poderlos agarrar (entre 5 a 10 minutos)
  6. Los huevos los puedes refrigerar hasta una semana.

Cómo pelar perfectamente tus huevos duros

No hay nada más frustrante que forcejear con la cáscara de un huevo duro. Si no logras removerla fácilmente con piezas grandes, terminarás quitando pedacitos o terminarás destruyendo el huevo. Para nunca tener problemas con este proceso, aquí hay unas sugerencias útiles:

Dales tiempo a tus huevos

Los huevos más viejos son más fáciles de pelar. Planea con tiempo y usa huevos que llevan una semana en el refrigerador. Conforme maduran los huevos, la humedad gradualmente se evapora a través de los poros de la cáscara, creando pequeños huevos de aire en la punta que se expanden. Esto resulta en la cáscara aflojándose de la clara, haciendo que sea más fácil pelar.

Sólo usa huevos fríos

Procura enfriar tus huevos antes de empezar a hervirlos para que sea más fácil pelarlos.

Quiebra cada huevo antes de meterlo al agua fría

Dejar que tus huevos duros se enfríen en agua hará que sean más fáciles de agarrar, pero quebrarlos un poco antes de meterlos al agua deja que agua entre entre la cáscara y el huevo, haciendo que sea más fácil separarlos a la hora de pelar.

Empieza de la parte más ancha

Una vez esté frío tu huevo, pela la cáscara desde la parte más ancha del huevo. Ya que aquí es donde se ubica el aire, será más fácil meter los dedos debajo y quitar la cáscara con piezas más grandes.

Pela debajo de agua corriendo

Si aún te cuesta trabajo quitar toda la cáscara sin problemas, hazlo en el lavabo con el agua corriendo.

Y con estos consejos deberías de siempre poder tener huevos duros perfectos sin problemas.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.