El Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia empezó a operar este lunes en los municipios de Nayarit y Colima, que integran la primera etapa en la que se incluyen 45 alcaldías, siete zonas metropolitanas y las delegaciones Gustavo A. Madero e Iztapalapa.
El subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación (Segob), Roberto Campa, informó que en esas zonas, que suman 40 por ciento de los delitos en todo el país, se encontró, en un primer diagnóstico, problemas de violencia familiar, familias rotas o monoparentales.
Además, problemas de violencia en el entorno escolar, falta de oportunidades y opciones para aprovechar el tiempo libre.
Expuso que dependiendo de los diagnósticos se elaborará para cada zona un «traje a la medida» de sus necesidades.
Puso como ejemplo el municipio de Colima, donde se tiene identificado por nombres y apellidos a los jóvenes con más problemas de violencia, «y de eso se trata, con eso vamos a trabajar y con los plazos que están definidos para identificar con precisión en dónde se generan esos fenómenos», explicó.
Campa Cifrián, quien puso en marcha el programa esta mañana en los municipios mencionados, resaltó que la instrucción del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, es que dicho programa esté listo en todo el país, por lo que en las próximas tres semanas se pondrá en marcha en todas las zonas que incluyen la primera etapa.
El programa comenzará mañana martes en los estados de Baja California Sur y Sonora, el miércoles, en Nuevo León; el jueves, en Chiapas y Sinaloa; el viernes en Tlaxcala, Puebla e Hidalgo, y el lunes 11 de marzo, en el Estado de México.
Recordó que en la zona metropolitana de Nuevo León y Morelos, se tuvo que reprogramar el arranque de esas acciones de prevención de la violencia.
El funcionario federal destacó que entre los diagnósticos que han encontrado, además de los datos delictivos y sociales, están las zonas en las que se generan el mayor número de problemas de violencia.
Comentó que los diagnósticos se entregarán a los gobernadores y presidentes municipales, para trabajar de la mano con la población; «trabajando con la gente vamos a identificar exactamente dónde están esas zonas en que se generan fenómenos de violencia», detalló.
Paralelamente a esas acciones, se reforzará el número de elementos de seguridad en las zonas con niveles de delincuencia altos, pues tanto la prevención como la estrategia reactiva en la parte institucional deben llevarse a cabo de manera coordinada, añadió.
«Nosotros hemos tenido comunicación con las autoridades de estas áreas para que el trabajo que se lleve a cabo sea conjunto», expuso el subsecretario de Gobernación.
Finalmente, señaló que en la segunda etapa se sumarán 53 municipios más hasta llegar a 100, los cuales se determinan de acuerdo con los índices delictivos y de violencia, así como razones sociales.
México, 4 Mar. (Notimex)