El único candidato reformista moderado, Hasan Rohani, ha ganado las elecciones presidenciales en Irán, poniendo fin a ocho años de gobierno conservador. “Es la victoria de la inteligencia, la moderación, el progreso (…) sobre el extremismo”, ha manifestado el vencedor.
Rohani ha obtenido el 50,68% de los votos -18,6 millones-, superando así el umbral necesario -un 50%- para ganar las elecciones en primera vuelta, informa el Ministerio del Interior. Los sectores moderados y reformistas respaldaban su candidatura.
En segundo lugar, el ultraconservador alcalde de Teherán, Mohamad Ggher Qalibaf, ha obtenido 6,07 millones de votos, seguido por el también ultraconservador principalista Said Halili, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional y principal negociador nuclear de Irán, con 3,17 millones. El porcentaje de participación ha sido del 72,7%.
En total competían seis candidatos para suceder al hasta ahora presidente Mahmud Ahmadineyad, quien, tras dos mandatos, no podía concurrir a un tercero, según la Constitución del país teocrático. El éxito inesperado de Rohani, según los comentaristas, ha consistido enmovilizar a buena parte de los reformistas desencantados y al electorado ajeno al régimen islámico, reacios a votar tras las presidenciales de 2009, cuando las denuncias de fraude y las protestas fueron sangrientamente reprimidas.
Rohani, un clérigo pragmático que fue secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional y negociador nuclear, ha sido en estos comicios el candidato de consenso de los reformistas de los sectores de Akbar Hashemi Rafsanyani y Mohamed Jatami, al renunciar el otro aspirante de ese signo, el ex vicepresidente Mohamad Reza Aref.
Durante la campaña dijo que como presidente iba a buscar el fin del aislamiento internacional. Tras ocho años de Ahmadineyad, el político dijo que quería aportar aire fresco a la política interior y exterior. Su slogan electoral fue ‘reconciliación y esperanza’.
Las reacciones a la elección no se han hecho esperar. Francia ya se ha mostrado dispuesta a trabajar con Rohani, especialmente en lo referente al programa nuclear y en la relación con Siria.
También EEUU ha mostrado su disposición al diálogo directo con Irán para tratar de alcanzar una solución sobre el programa nuclear.
El mundo, 15 Junio 2013.