El norte de Italia se encuentra “al borde del precipicio” debido a la crisis económica y puede arrastrar al país a un retroceso de medio siglo, advirtió hoy el presidente de la Confederación de Industriales (Confindustria), Giorgio Squinzi.

Durante la asamblea general de los industriales, celebrada en Roma, Squinzi resaltó la “debilidad estructural” del sur del país, en donde “el esfuerzo para el crecimiento, el desarrollo y el empleo asume las características de un reto para la supervivencia”.

Squinzi dijo que es urgente que la economía italiana retorne a la senda del crecimiento y para ello llamó a apoyar la “vocación industrial” del país.

“Tenemos un gran compromiso común, realizar una nueva Italia, europea, moderna y abierta”, anotó.

Urgió al gobierno a efectuar las reformas necesarias, comenzando por la nueva ley electoral y criticó la política fiscal que, en su opinión, “desalienta las inversiones y el crecimiento”.

Pidió la reducción de la presión fiscal, pues recordó que más de la mitad de lo que las empresas pagan a los trabajadores termina en las cajas del Estado.

Urgió a lanzar una política a favor del empleo, pues dijo que la falta de trabajo “es la madre de todos los males sociales”.

Advirtió que en los últimos 18 meses los préstamos erogados a las empresas se han desplomado al nivel más bajo desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

El ministro de Desarrollo Económico, Flavio Zanonato reveló que respecto a 2011 los préstamos a las empresas han disminuido en casi 60 mil millones de euros y dijo que se trata de “una restricción crediticia sin precedentes”.

El primer ministro Enrico Letta, quien estuvo presente en la asamblea de Confindustria, reconoció que la coyuntura del país “es dificilísima”, aunque prometió que realizará su máximo esfuerzo para superar los problemas.

Roma, 23 May (Notimex).