La dieta mediterránea verde es lo que probablemente te estarás imaginando: una combinación de esta cocina regional con una alimentación a base de plantas.
Esta dieta está vinculada con un menor riesgo enfermedades crónicas y ciertos tipos de cáncer. También se asocia con un reducido impacto ambiental porque promueve el uso de la producción de alimentos sostenibles.
Además de eliminar carnes rojas y procesadas y reducir el consumo de lácteos, algo particular de esta dieta es que resalta el consumo de unos productos en particular: 100 g de lenteja de agua mankai (una planta acuática alta en proteína), tres a cuatro tazas de té verde y una onza de nueces.
Sonará muy específico, pero estos alimentos son muy altos en polifenoles, que sirven como antioxidantes para el cuerpo.
Beneficios de la dieta mediterránea verde
Tiene varios beneficios seguir esta dieta, incluyendo un menor riesgo de enfermedades crónicas, bajarás de peso, mejorará tu bienestar intestinal y tu bienestar en general.
También puedes reducir tu riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en un 50%. También se ha vinculado con una disminución de inflamación.
Los altos niveles de polifenoles son probablemente lo que contribuye a una disminución de absorción de grasa después de comer, un aumento de glucosa en los músculos, impide que vasos sanguíneos nuevos se formen en tejidos grasos y reduce la inflamación crónica.
Es mejor consumir polifenoles en comida en lugar de conseguir suplementos.
Esta dieta es buena para cualquiera, con la única excepción de si no puedes comer nueces por cualquier razón, quizá no sea para ti dada la importancia de este alimento en esta dieta.