En un estudio reciente, 320 hombres en una relación de largo plazo recibieron inyecciones de testosterona y progestágeno, que funciona al disminuir disminuir el recuento de espermas a un nivel que previene el embarazo.

Cuando te inyectas con testosterona sintética, tu cuerpo pensará que ya tuvo suficiente, deteniendo tu producción natural de esta hormona. Como resultado, tu recuento de esperma cae drásticamente. La inyección fue exitosa en 96% de los voluntarios.

Recibieron la inyección cada 8 semanas por alrededor de 56 semanas. Durante este periodo, sólo ocurrieron 4 embarazos, una tasa de falla similar a la que se ve en las pastillas anticonceptivas en mujeres.

Lamentablemente, después de revisar el estudio, una comité externa recomendó que se dejaran de administrar las inyecciones y se detuvo el estudio. Esto fue porque los hombres tenían mucha probabilidad de adquirir una variedad de efectos secundarios preocupantes, incluyendo cambios repentinos de estado de ánimo y depresión.

De hecho, 17% de los hombres en el estudio reportaron alguna clase de desorden emocional, 5% experimentaron cambios repentinos en su estado de ánimo, 4% desarrollaron alguna forma de depresión y 2% se volvieron hostiles.

La razón puede ser por demasiada testosterona. Como los hombres del estudio ya tenían niveles normales de esta hormona, en aumento pudo haber llevado a estos hombres al borde, aumentando aún más el riesgo de contraer algún efecto secundario.

Otros efectos secundarios como acné (46%), dolor en el punto de inyección (23%) y un aumento de líbido (38%) eran comunes también.

¿Así que qué significa esto para el futuro de los contraceptivos hormonales para hombres?

Básicamente, el estudio muestra que funciona y que el público lo quiere tener como opción. Al final del estudio, 82% de los hombres y 76% de sus parejas femeninas dijeron que lo volverían a usar.

Pero hay unos detalles importantes que se tienen que solucionar antes de volver esta inyección una opción viable para el público. Se tienen que hacer más estudios para averiguar si el problema es con la dosis de la hormona o el tiempo que se toman para poder disminuir el recuento de espermas y a la vez evitando serios efectos secundarios.

Quizá nos falten unos 5 a 10 años para poder optar por esta opción en farmacias, pero mientras tanto todavía tienes las opciones que, aplicando correctamente, sólo tienen un 2% de falla los condones, .3% para las pastillas para mujeres y .1% para las vasectomías.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.