Los hijos de las mujeres que ingirieron con regularidad frutos secos (maní, almendras, nueces, pistachos) durante el embarazo presentaron un riesgo menor de sufrir alergias a estos alimentos, según un estudio publicado en la revista “American Medical Association”.
El estudio es el primero en demostrar que una madre que ingiere frutos secos durante el embarazo podría ayudar a crear en el bebé una tolerancia a ellos después del nacimiento, explicó su autor principal, el Dr. Michael Young.
El efecto pareció ser mayor en las mujeres que ingirieron una mayor cantidad, cinco o más porciones semanales, de acuerdo al estudio, que controló los factores como historial familiar de alergias a frutos secos y otras prácticas alimenticias.
Actualmente no hay un lineamiento médico formalmente reconocido para el consumo de frutos secos durante el embarazo o infancia.
Young dijo que habrá más investigaciones en 2014 que evalúen el impacto de la dieta en los infantes con alergia a los frutos secos, el cual debería de dar a los legisladores médicos información suficiente para ofrecer recomendaciones amplias.
“No proporcionamos la causa y el efecto, así que no tenemos una base para recomendar dietas”, dijo Young.
Pero dijo que su equipo no ve razones para que las mujeres embarazadas limiten sus dietas con la vista puesta en la prevención de alergias en los niños.
Fuente: Globovision