Un multimillonario euroescéptico de 80 años de edad amenaza con alterar el cómodo consenso que ha dominado la política austríaca durante décadas.

Frank Stronach, fundador de la firma mundial de autopartes Magna International, creó su propio partido político –Team Stronach– en Austria en septiembre pasado.

Nacido en Austria, en el seno de una familia de clase trabajadora, pasó muchos años en Canadá, donde hizo su dinero, unos US$ 1.200 millones, según la lista de la revista Forbes.

También se postuló sin éxito para el Parlamento de Canadá en 1988.

Stronach se está posicionando como una alternativa ante la coalición de partidos de centro-izquierda y centro-derecha que tradicionalmente ha gobernado Austria.

Muchos de los vecinos europeos de Austria también están presenciado fuertes desafíos de los partidos antisistema, los cuales han sido alimentados por la frustración que ha generado la crisis de la eurozona.

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[sws_blue_box box_size=”630″] “Nuevos principios” [/sws_blue_box]

Stronach está financiando la campaña con su propio dinero y dice que espera gastar alrededor de US$32 millones hasta las elecciones generales que tendrán lugar en septiembre.

“Austria necesita un nuevo conjunto de principios”, me dijo en un club de golf de estilo estadounidense, cerca de la sede de Magna Internacional en Oberwaltersdorf, en las cercanías de Viena.

“Queremos luchar contra los políticos profesionales. Durante sesenta años este gobierno ha perdido enormes cantidades de dinero”.

“No tienen la menor idea sobre los negocios”, dijo. “Si la economía no funciona, nada más funciona”.

Stronach es particularmente mordaz respecto del euro.

“Nunca tuvo oportunidad de funcionar, por la sencilla razón de que, como sabemos, los estados del sur son básicamente estados agrícolas”.

“Los estados del norte son países industrializados, así de grandes son las diferencias. Una moneda común simplemente no funciona. No en Europa”.

Pero fue un poco impreciso cuando le pregunté si él sacaría a Austria del euro.

“No, yo diría que cada país debería tener, de cierto modo, su propio euro, de forma que puedan revaluar y devaluar sus propias monedas. Estoy seguro de que todos los austriacos dirían que un euro de Austria vale más que un euro de Grecia”.

Stronach también promete impuestos corporativos más bajos, una administración reducida y la elección de ciudadanos que no sean políticos profesionales al parlamento.

Su mensaje parece haber tocado una fibra sensible de algunos en Austria.

Stronach ha estado obteniendo alrededor del 10% en los últimos sondeos de opinión.

En las recientes elecciones en la provincia meridional de Carintia, obtuvo casi el 11%, Muchos de estos votos se los quitó al Partido de la Libertad, de extrema derecha.

Su partido tropezó en las elecciones regionales en el Tirol y no pudo entrar en el parlamento provincial. Pero Team Stronach podría representar una amenaza para la renovación de la gran coalición entre el centro-izquierda y centro-derecha en las venideras elecciones generales.

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[sws_blue_box box_size=”630″]Austriacos desilusionados [/sws_blue_box]

Team Stronach ya se encuentra en el parlamento nacional de Austria, pese a que todavía no se ha realizado la elección general. En noviembre, un grupo de diputados del BZOE, el partido de extrema derecha creado por el desaparecido político austríaco Joerg Haider desertó a Team Stronach.

Austria –que tiene fuertes lazos económicos con Alemania y la tasa de desempleo más baja de la Unión Europea– no ha sido tan duramente golpeada por la crisis del euro como otros países europeos.

El analista político Thomas Hofer dice que muchos en Austria no querrán alejarse de las coaliciones políticas que han hecho próspero al país para cambiarlas por un multimillonario con poca experiencia política. Pero dice que el mensaje de Stronach está encontrando el apoyo de algunos austriacos desilusionados, que se sienten frustrados por la falta de alternativas a la gran coalición.

“Pienso que él está tocando una fibra sensible en Austria. Ir en contra del sistema de partidos establecido es ciertamente popular porque existe un gran descontento en el país con algunos de los viejos partidos”.

“Pero en términos de tono, él ha sido un poco extremo en sus primeros meses como político. Mire sus sugerencias de los euros nacionales. La gente sabe por su propia experiencia que eso no va a funcionar”.

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[sws_blue_box box_size=”630″]”Por aburrimiento” [/sws_blue_box]

Thomas Hofer dice que no cree que el fenómeno Stronach dure más que unos pocos años.

“Creo que este partido carece de un futuro largo y brillante porque es muy basado en la personalidad de Frank Stronach. Él está limitando el alcance del Partido de la Libertad, él está haciéndose de muchos de esos votos de protesta que hay por ahí”.

“Pero tan pronto como abandone el partido, no habrá nadie más que pueda hacerse cargo. Si no está Stronach, entonces no hay partido”.

Stronach, que ha descartado competir para ser primer ministro, insiste en que su movimiento no es un partido de protesta. Dice que quiere ser capaz de decirles a sus nietos que él ayudó a “crear una sociedad mejor”.

Pero otros austriacos, como el periodista Herbert Lackner de la revista Profil, son más cínicos respecto a las razones por las que un millonario jubilado podría querer entrar en la refriega política.

“Está un poco aburrido, tiene 80 años y no tiene nada que hacer”, asegura.

BBC