El cementerio San Andrés Mixquic, uno de los más visitados en la zona metropolitana y donde año con año se recuerda a los muertos con una gama de aromas, colores y sabores, está al borde del colapso por el abandono y sin lugar para un difunto más, denunciaron la asociación vecinal Rescatemos Mixquic y el PRI-DF.

Ubicado en torno a la iglesia, en Día de Muertos es centro de reunión de los vecinos y de miles de visitantes que acuden cada año a presenciar el rito ancestral de velar a los difuntos, pero la sobresaturación que ya presenta hace urgente destinar un nuevo espacio para atender la demanda, sin afectar la tradición.

En Mixquic, el camposanto es el lugar donde cada año los días dedicados a Todos Santos y los Fieles Difuntos se combina la tradición prehispánica con el rito católico de la muerte, pero el espacio ya es insuficiente para nuevos entierros y aun para los visitantes, que sólo pueden adentrarse por reducidos pasillos o caminando sobre las tumbas.

El coordinador Regional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la zona oriente, Marcos Zaldívar, señaló que los vecinos tienen que enterrar a sus difuntos prácticamente a ras de tierra y encima de otros, porque ya no hay cabida para más entierros.

El también coadyuvante de la organización Rescatemos Mixquic anotó que una de las causas del deterioro del sitio más emblemático “El Lugar de los Mezquites”, es el hundimiento que presenta la zona.

Comentó en entrevista que esta situación se presenta por la desecación del lago de Chalco, que circundaba el lugar donde las chinampas eran la principal actividad agrícola.

El hundimiento, detalló, ha provocado que las tumbas estén encima de otras, lo que rompe el encanto de los mausoleos levantados, dejando a la intemperie a los ataúdes, situación que de no atenderse, podría representar un problema de salud pública.

Recordó que desde el año 2000 el Patronato Pro Obras San Andrés Mixquic A.C, inició un proceso para impulsar la compra de un terreno para la construcción de un nuevo cementerio y elaborar un proyecto arquitectónico que rescate los simbolismos propios de esa tradición.

A través de gestiones ante la delegación Tláhuac, el Patronato sumado a la participación del Consejo del Pueblo, del Comité de Barrio Mágico Turístico de San Andrés Mixquic y los Mayordomos de los Barrios, se logró adquirir un terreno de 28 mil metros cuadrados para construir el nuevo camposanto.

“Desde que inició la administración de la nueva delegada en Tláhuac, mes con mes nos reunimos para desahogar avances del proyecto. Hay avances en los estudios que se requieren para obtener los permisos de construcción, pero aún faltan los dictámenes de impacto ambiental y vial”, comentó.

Explicó que además de los estudios para iniciar la construcción, es necesario que la delegación etiquete presupuesto dentro de su Programa Operativo Anual, que se tendrán que asignar en el ejercicio fiscal 2014, por un monto aproximado de 50 millones de pesos para concluir la obra en una sola etapa.

Para seguir con el proyecto, el diputado Fernando Mercado Guaida, mediante un punto de acuerdo expuesto en la Asamblea Legislativa, solicitó a la jefa delegacional, Angelina Méndez, continuar con los trámites iniciados en la administración anterior para construir el nuevo panteón y mantener el diálogo con representantes de la comunidad.

Además de las reuniones mensuales para revisar los avances del proyecto del panteón, los vecinos de Mixquic solicitaron apoyo de la delegación para corregir el desnivel en la carretera Tetelco-Mixquic, que ha provocado fracturas en la vialidad.

Sin embargo, las autoridades delegacionales argumentan que por tratarse de una vialidad primaria la corrección le corresponde al Sector Central.

Pero la delegación tampoco ha hecho la solicitud para reparar la carretera, que de acuerdo con los habitantes representa un peligro para los automovilistas.

También está pendiente la ayuda para limpieza de espacios que algunos habitantes de Mixquic utilizan para depositar basura, por lo que los colonos realizan guardias para vigilar que ninguna persona tire sus residuos en la vía pública.

La delegación tampoco se ha encargado de proteger el canal que rodea a Mixquic, cuya capacidad es mínima y se reduce presa de la contaminación.

Al abundar sobre el proyecto del nuevo panteón de Mixquic, Marco Zaldívar señaló que la construcción de la nueva sede pretende rescatar los elementos tradicionales del culto a los muertos y contar con espacio ordenado y suficiente para sepultar a los difuntos.

Uno de ello es el Tzompantli, un altar compuesto por cráneos, cuyo origen proviene del juego de pelota prehispánico donde el equipo de virreyes perdedor era decapitado y sus cabezas colocadas en lanzas como parte de un altar.

En el nuevo recinto, que tendrá una vida útil de 50 años, la representación de esta ofrenda formaría parte de la decoración de las canaletas que representarán la zona chinampera de Mixquic.

También se proyecta la construcción de una capilla y un campanario, réplicas de las originales de las del panteón de Mixquic, además de oficinas administrativas para que los interesados puedan hacer los trámites de defunción sin necesidad de trasladarse hacia otras oficinas.

Según el proyecto, la entrada al panteón simulará unos brazos abiertos que significarán el recibimiento a los seres que han partido, tendrá un espacio para la representación de danza prehispánica y estacionamiento.

“La finalidad es rescatar la tradición de un pueblo considerado Patrimonio de la Humanidad, darle dignidad y eso es lo que impulsaremos los habitantes de Mixquic”, aseguró.

Zaldívar expresó que tienen confianza en que la construcción del nuevo panteón se inicie el próximo año, porque hoy vemos voluntad política y se avanza en las mesas de trabajo con la delegación.

Sólo nos falta un permiso para concretar la construcción del nuevo panteón y que la ALDF autorice el presupuesto para ello, que calculamos en alrededor de 50 millones de pesos, puntualizó.

Fuente: México, 31 Oct. (Notimex).