El gobierno del Estado de México gasta anualmente hasta 600 millones de pesos para atender problemas colaterales derivados de los altos niveles de obesidad que se presentan entre la población mexiquense, donde uno de cada tres niños registran sobrepeso u obesidad, mientras que en los adultos constituye la primera causa de muerte.
Lo anterior significa hasta el 10% del total del egreso programado en materia de salud.
El secretario de Salud del gobierno estatal, César Nomar Gómez Monge, advirtió que de no reducirse la obesidad, en unos años podría colapsar todo el sistema de salud, no sólo a nivel nacional, sino estatal.
“Hablamos de que en general se invierten en el Estado de México anualmente en temas relacionados con la obesidad, sobrepeso, diabetes y enfermedades cardiovasculares, alrededor de 600 millones de pesos en global”, señaló.
Indicó que este gasto incluye los nuevos centros de control diabético que está inaugurando el gobierno mexiquense en distintos puntos del territorio, tanto específicos como las instalaciones que están dentro de las clínicas y hospitales para ese propósito.
En este sentido, reconoció que los niños mexiquenses en la escala nacional son algunos de los más obesos en el país, por lo que la administración local ya prepara un nuevo programa que será lanzado en unos días más para atender esta problemática, porque si bien es uno de los estados que más gasta en este tema, también es uno de los más innovadores.
“Es un tema que tenemos que atender a la brevedad, porque si nosotros tenemos una población con obesidad infantil importante, pues en el futuro serán diabéticos y eso en el futuro solicitara también un tema importante de atención”, señaló.
Pulso, 28 Junio 2013.