Al menos 20 personas murieron y unas 50 resultaron heridas hoy en varios atentados en Irak, la mayoría contra las fuerzas del orden, un día después de que una serie de ataques en barrios chiítas de Bagdad, dejó unos 70 muertos y casi 200 lesionados.

El atentado más sangriento se produjo en Bagdad, donde un carro bomba explotó junto a la plaza de Mudafar, en el barrio de mayoría chiíta de Ciudad Sadr, con un saldo de siete muertos y 34 heridos, según fuentes policiales, citadas por la agencia de noticias Aswat al-Iraq.

En Tarmiya, a 40 kilómetros al norte de Bagdad, un camión bomba conducido por un suicida estalló carca de un puesto de control, cobrándose la vida de cuatro personas, entre ellos dos policías, además de herir a otros ocho civiles.

En el norte de Irak, un alto jefe de la inteligencia policial y tres agentes fallecieron al explotar una bomba en la ciudad de Mosul, donde los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y milicianos dejaron cuatro muertos.

En otro episodio de violencia, dos combatientes tribales perdieron la vida y otros dos resultaron heridos durante el asalto de un grupo armado a un puesto de control en el norte de Al Dur, en la provincia de Salahedín, al norte de la capital iraquí.

En Diyala, en el oriente de Irak, un agricultor murió y su nieto de siete años de edad fue herido por disparos de un grupo armado, mientras un presunto extremistas pereció cuando colocaba una bomba cerca de la casa de un jefe tribal en el oeste de Baquba.

Estos actos de violencia tienen lugar un día después de una ola de atentados con bomba y carros bomba en zonas concurridas de barrios chiítas de Bagdad y sus alrededores, dejando más de 70 muertos y alrededor de 200 heridos.

Hasta ahora ningún grupo se ha atribuido los atentados del lunes y este martes, sin embargo rebeldes musulmanes sunitas y el ala iraquí de Al Qaeda han incrementado sus ataques desde comienzo del presente año, a menudo eligiendo como objetivo zonas de mayoría chiíta.

El pasado abril se convirtió en el mes más sangriento en Irak en casi cinco años, con 721 fallecidos, en medio de un alarmante rebrote de los ataques, dirigidos principalmente contra objetivos chiítas y las fuerzas de seguridad.

Madrid, 28 May (Notimex)