
Pan francés con crema batida de maple: un desayuno para consentirte
Hay mañanas que piden algo más que un café rápido y un pan tostado. Hay días en los que el desayuno se convierte en plan, en momento, en antojo. Este pan francés con crema batida de maple es exactamente eso: una receta sencilla que se transforma en apapacho puro, ideal para compartir, para brunches de fin de semana o simplemente para darte gusto.
Ingredientes (para 4 porciones)
Para el pan francés:
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4 rebanadas gruesas de pan brioche o pan de caja tipo artesanal
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2 huevos
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¾ taza de leche entera
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1 cucharadita de extracto de vainilla
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½ cucharadita de canela en polvo
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Una pizca de sal
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Mantequilla para la sartén
Para la crema batida de maple:
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1 taza de crema para batir (bien fría)
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2 cucharadas de miel de maple
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½ cucharadita de extracto de vainilla
Extras opcionales para servir:
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Frutas frescas (fresas, plátano, moras)
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Un chorrito extra de miel de maple
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Nuez picada o almendras fileteadas
Instrucciones
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Preparar la crema batida: En un tazón frío, bate la crema con la miel de maple y la vainilla hasta que tenga consistencia firme pero suave. Reserva en el refrigerador mientras haces el pan.
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Preparar la mezcla del pan francés: En otro tazón, bate los huevos, la leche, la vainilla, la canela y la sal. Sumerge las rebanadas de pan en la mezcla por unos segundos, permitiendo que absorban bien el líquido sin deshacerse.
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Cocinar el pan: Calienta una sartén grande con un poco de mantequilla a fuego medio. Dora las rebanadas de pan por ambos lados hasta que estén doradas y cocidas por dentro, unos 2-3 minutos por lado.
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Servir: Coloca el pan francés en un plato, añade una generosa cucharada de crema batida de maple encima y decora con frutas frescas, nueces o un extra de miel.
Por qué nos encanta
Este desayuno es una mezcla perfecta entre lo clásico y lo indulgente. La crema batida con maple le da un giro interesante y más ligero que un glaseado o una mantequilla, mientras que el pan brioche aporta una textura suave y esponjosa que se dora maravillosamente. Perfecto para un desayuno de fin de semana o para una reunión con amigas. Como dicen en Bon Appétit, el french toast es “nostálgico, fácil de hacer y altamente personalizable”.
Publicado por Redacción.