Ya sea que tus cuentas se te están acumulando o simplemente no tienes la disciplina de ahorrar un poco de dinero cada mes, hay muchísimas razones por las cuales es difícil tener una buena cantidad de dinero en una cuenta de ahorros.

El problema es que una vez te pagan tu quincena, el dinero tiene que ir a varios lugares simultáneamente. Necesitas pagar tus cuentas, tienes que pagar el saldo de tu tarjeta de crédito, necesitas comprar comida en el supermercado, quizá te hagan falta unas cosas no esenciales. Lo que te sobra después de todo esto se va en tus gastos a tu discreción. Así que quedas sin ahorros, básicamente.

Nunca saldrás de este ciclo vicioso hasta que empieces a tratar tu cuenta de ahorros como un gasto que tienes que hacer mensualmente, junto con la renta y tus servicios.

Quizá tendrás que organizar algún presupuesto mensual, pero lo más importante en tu lista de prioridades debería ser ahorrar.

Ahorro, cuentas, diversión: en ese orden
La mayoría de la gente usa su dinero en este orden: pagan sus cuentas, usan el dinero para diversión y luego ahorran. Un buen plan para pagarte a ti mismo debería dejarte pagar tus cuentas y cumplir con tus responsabilidades sin tener que sacrificar ninguno de estos factores. ¿Así que cómo deberías ahorrar?

Deberías de ahorrar mínimo el valor de una hora de trabajo diario. Así puedes empezar lentamente:

Cómo empezar a ahorrar de tus ingresos:

  • Calcula para cuánto en realidad te alcanza, no pienses en cuánto alguien más te dice que deberías de ahorrar. Elabora un presupuesto sencillo. Deja a un lado el dinero que normalmente gastas en tus gastos mensuales. Luego calcula qué gastos puedes recortar. Cosas como llevar tu propio almuerzo al trabajo puede llegar muy lejos para reducir tus gastos mensuales.
  • Tienes que ir poco a poco. Ahorrar es cómo hacer ejercicio, tienes que empezar con poco y gradualmente vas incrementando la carga. Uno podrá discutir que es un desperdicio de tiempo ahorrar 1% de tus ingresos. Pero si haces esto por un rato, te darás cuenta que es fácil y querrás aumentar la cifra hasta que poco a poco lo seguirás incrementando conforme te vas acostumbrando.
  • Ya que tengas un buen ritmo con tus ahorros sabrás cuánto debes ahorrar y hacia dónde redirigir el dinero. Puedes programar una transferencia mensual de tu cuenta de cheques a tu cuenta de ahorros para que regularmente estés recibiendo la misma cantidad de dinero y nunca caigas en la ilusión de que es dinero que puedes gastar.

¿Cuál es la recompensa?
Aparte del dinero acumulado que tendrás, gozarás de estos tres beneficios:

  • Te ayuda a desarrollar buenos hábitos para ahorrar. De esta manera te estas enviando a ti mismo el mensaje de que eres más importante que la compañía de luz o tu casero.
  • Crea bueno hábitos financieros. Al recordar que primero debes ahorrar y luego pagar y gastar, te das la oportunidad de dejar dinero a un lado antes de pensar cómo gastarlo.
  • El dinero ahorrado es dinero práctico. Esos ahorros algún día serán útiles porque siempre tendrás algo para emergencias o para tu jubilación o con esto podrás tener para pagar el enganche de un auto o una casa nueva.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.