2004, Adolfo el “Bofo” Bautista, Francisco “el gatillero” Palencia, Jaime Lozano, Francisco “Kikín” Fonseca y los arqueros Oswaldo Sánchez y Sergio Bernal, disputaban una de las finales más dramáticas de los últimos tiempos, los penales eran los encargados de decidir al campeón. Fueron 9 penales ejecutados de manera impecable, hasta que un tal Rafael Medina voló su disparo e hizo que el estadio enloqueciera, los Pumas eran campeones.
Ahora se viven realidades muy distintas, el fin de semana se juegan una final pero para saber quien es el peor del torneo.
El momento desastroso que viven el equipo más importante de México, o sea las Chivas de Guadalajara, así como uno de los llamados grades, Pumas, no hace más que obligar a sus aficionados, directivos, cuerpo técnico y jugadores a rezar a partir de ya, para conseguir el triunfo que enfrenta a dos de los peores equipos del torneo en la próxima jornada. Y es que una victoria tal vez no salve ni remotamente la lágrima de temporada que han tenido estos dos equipos, pero por lo menos sería agradable ganar este partido que historia tiene, la jornada 16 entrega un partido que prácticamente definirá a la máxima decepción del futbol mexicano.
Habrá que analizar que es lo que está pasando con estos dos equipos, a los de Guadalajara, de pronto se les notan chispazos de actitud, complementados de algo de futbol, el problema es que aparecen muy de vez en cuando, si volteamos a ver la plantilla, nombres como Miguel Sabah quien dicho sea de paso ni titular es, Aldo de Nigris, maravilla haciendo pareja con Humberto Suazo en Monterrey, Rafael Márquez Lugo y Marco Fabián aparecen vislumbrando un éxito en la portería rival, pero 14 goles a favor son la cuota hasta el momento que no ha ayudado en nada absolutamente, 9 para Chivas y 10 puntos para Pumas, son el reflejo de una temporada para el olvido completamente. En cambio, el odiado rival de prácticamente todo el futbol mexicano, el América les lleva más de 20 puntos, juega con un equipo “B” en la liga y hasta se viste de héroe verde para maquillar la pena internacional que vive México buscando calificarlo al mundial.
Se habla ya de cambios importantes dentro de ambos clubes, en los que no nos sorprendería encontrar por parte de Chivas a hombres como Luis Michel o Hector Reynoso, fuera del plantel, quizá su ciclo terminó y no tienen más que hacer en la institución.
Un estadio magnífico y una afición que ha hecho notar su inconformidad en las presentaciones del rebaño, no merecen un paso como el que ha llevado el rebaño. Algunos hablan de que la solución es olvidar la eterna tradición de puros mexicanos, y al más novedoso estilo de la selección nacional poder contar con gente naturalizada pero no, talento mexicano lo hay, estos dos equipos se encuentran en un abismo de mal futbol y falta de actitud, suficientes motivos para terminar el torneo como lo están haciendo. No queda más que esperar que se renueven de fondo este par de equipos, ya que sin duda cuando están bien, la selección está bien… y vaya que necesitamos eso.