La Unión Europea (UE) pedirá hoy a sus socios del G-20 evitar una “oleada de depreciación” monetaria artificial durante la reunión que celebrarán este fin de semana en Rusia.
“El exceso de volatilidad y movimientos desordenados en las tasas de cambio puede tener implicaciones adversas para la estabilidad económica y financiera”, dijo hoy en Bruselas el comisario europeo de Economía, Olli Rehn, tras discutir el tema con ministros europeos del área.
“Es por ello que debemos apoyarnos en una activa coordinación de políticas para prevenir una oleada de devaluaciones competitivas”, agregó.
Rehn dijo confiar que las mayores potencias mundiales que conforman el G-20 confirmen su compromiso de no intervenir en las tasas de cambio sin consultar antes con sus socios, como hizo este día el G-7.
El G-7 formado por Estados Unidos, Canadá, Japón, Francia, Alemania, Italia y Reino Unido, publicó este día una declaración afirmando que sus bancos centrales no pretenden depreciar sus respectivas monedas al imprimir más billetes, sino simplemente atender a una mayor demanda doméstica.
La posición europea va en contra de la expectativa de Francia, que en los últimos días ha pedido a sus socios adoptar una política monetaria “coherente” para controlar la valorización del euro, cuya reciente alza está perjudicando las exportaciones europeas.
“Los tipos de cambio nunca deben ser objetivos de las políticas, pero por supuesto tienen un impacto en el crecimiento y en la inflación, y eso tiene una influencia indirecto en la toma de decisiones políticas relativa a las políticas monetarias y a otras áreas”, sostuvo Rehn. Bruselas, 12 Feb (Notimex)