
Porque crecer no significa dejar atrás los sabores que más te emocionaban
Si te emocionaba despertar sólo por el desayuno, probablemente era por ese cereal de caja azucarada que ahora sólo comes de vez en cuando “por nostalgia”. Pero ¿y si lo usas para preparar postres cool que puedas compartir? Piensa en eso: tu cereal favorito de la infancia convertido en snacks para fiestas, reuniones o simplemente para consentirte cuando quieres un break dulce.
Acá te dejamos varias ideas para reinventar esos sabores que marcaron tus mañanas.
Rice Krispies con más estilo
Sí, los clásicos Rice Krispies Treats siguen siendo una joya, pero puedes elevarlos: agrégales chispas de chocolate blanco, una pizca de sal de mar y decóralos con mini marshmallows tostados encima. O cambia los Rice Krispies por Froot Loops, Choco Krispis o incluso Lucky Charms para hacerlos aún más divertidos.
Cheesecake con base de cereal
¿Usas galletas para la base del cheesecake? Sustitúyelas por cereal triturado con mantequilla derretida. El Cap’n Crunch o los Corn Pops pueden dar una textura y sabor inesperadamente deliciosa. Arma porciones individuales en vasitos para que quede como un postre listo para compartir.
Paletas heladas con cereal
Haz paletas caseras mezclando yogurt griego con un poco de miel, trozos de fruta y tu cereal favorito. Puedes hacer capas alternando los ingredientes y congelar en moldes. Trix y Zucaritas son perfectos para darle color y textura crujiente a las paletas.
Malteadas con toque crunchy
Prepara una milkshake de vainilla o chocolate y añade un puñado de Cinnamon Toast Crunch, Reese’s Puffs o Nesquik cereal. Mezcla una parte dentro de la malteada y guarda otra para decorar por encima con crema batida. El resultado: una explosión nostálgica de sabor y azúcar.
Trufas de cereal
¿Trufas, pero casuales? Mezcla mantequilla de maní, cereal molido (puede ser Honey Nut Cheerios) y un poco de miel hasta formar una masa manejable. Haz bolitas y pásalas por más cereal triturado o chocolate derretido. Son perfectas para un snack rápido o un postre que se ve más elaborado de lo que realmente es.
Usar tu cereal favorito como base para crear algo nuevo no solo es divertido, también le da un giro emocional a tus postres. Es ese tipo de cocina que sabe a infancia, pero se come con gusto adulto. Y si te gusta explorar nuevos sabores con un twist inesperado, quizá también te interesen estas recetas de desayuno con vibes de cena.
Publicado por Redacción.