El Senado de la República realizó el foro “Buenas Prácticas Internacionales contra la Trata de Personas”, que pretende afinar el marco legal e institucional para lograr en México un combate más eficiente a ese delito, considerado la esclavitud moderna.

La presidenta de la Comisión Especial contra la Trata de Personas del Senado, Adriana Dávila Fernández, expuso que las reformas a la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en esa materia tienen el propósito de hacer su aplicación más eficiente.

Al inaugurar el foro, enfatizó que el tema genera mucha polémica; “hoy mismo en México estamos viviendo una discusión que a veces se torna difamatoria, pero que es resultado de que lo que estamos haciendo va a valer la pena para las víctimas”.

La subsecretaria de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Lía Limón, señaló que la ley vigente, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 14 de junio de 2012, se diseñó bajo una perspectiva integral de derechos humanos.

Dicha disposición se basa en la prevención y en la sanción del delito de trata de personas, así como en la reparación del daño a las víctimas.

Aseveró que la propuesta para modificar diversos artículos de la norma, pretende armonizar la Ley General de Víctimas con la ley de trata, y que el foro y los espacios de discusión que se organicen en el Senado son para fortalecer la iniciativa.

Limón García aseguró que México trabaja para contar con un marco jurídico amplio y apropiado, y es necesario aprovechar los espacios de análisis para incorporar las mejores prácticas internacionales contra la trata de personas, adaptándolas a la realidad del país.

Por otra parte, el representante en México de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNODC), Antonio Luigi Mazzitelli, señaló que se han escuchado muchas reacciones a la propuesta de cambios a la ley sobre trata, lo que es justo, legítimo y positivo.

Subrayó que sólo lo irrelevante no se debate, lo que de verdad cambia las cosas sí tiene que ser debatido, por lo que a nombre de la UNODC agradeció la oportunidad de participar en ese foro, para que la lucha contra la trata de personas no sea algo estático.

Los protocolos y convenciones no son suficientes, se necesita impulsar un cuerpo normativo nacional y llevarlo a la práctica, sobre todo por lo relacionado con el protocolo en la materia, respecto a sus tres ejes fundamentales: prevención del crimen, protección de las víctimas y persecuciones de los criminales, consideró.

Agregó que México ha sido uno de los impulsores de las “tres P” del protocolo, a través del trabajo normativo, con la ley aprobada el año pasado y con el reglamento, considerado como paso importante en la lucha contra la trata.

Mazzitelli ofreció su asesoría para que la ley sea mejor y para que no sólo se desarrollen los estándares internacionales, sino que se superen.

La lucha tiene que ser a nivel transnacional y también a nivel nacional, particularmente en México, país de origen, tránsito y destino de víctimas de la trata, aseveró.

En su intervención, el primer visitador general de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis García López Romero, destacó que según el Departamento de Estado de Estados Unidos, se estima que 27 millones de personas son víctimas de trata en el mundo.

Refirió que de ellas, la Organización Internacional del Trabajo ha reportado 14.2 millones de explotadas laboralmente, 4.5 millones explotadas sexualmente y 2.2 millones sujetas a trabajo forzado impuesto por el Estado.

Por lo anterior, para la CNDH es una prioridad que las autoridades del Estado mexicano erradiquen ese delito, y para lograrlo se debe asumir una estrategia integral que incluya a todas las personas o grupos que directa o indirectamente están relacionados con la cadena.

El funcionario reconoció que en la lucha para enfrentar ese flagelo social se tienen avances significativos en el ámbito legal, sin embargo, el camino para su erradicación es largo, y el reto es lograr que los propósitos plasmados en las leyes de la materia se traduzcan en acciones eficaces.

El jefe de misión de la Organización Internacional para las Migraciones, Thomas Weiss, recordó que la trata de personas representa uno de los retos más complejos que enfrenta la humanidad, pues según el Departamento de Estado de Estados Unidos, sólo en 2012 se sumaron 46 mil nuevas víctimas a nivel internacional.

La explotación con fines sexuales, laborales o para la extracción de órganos, genera ganancias anuales de casi 40 mil millones de dólares, lo que la ubica en una de las tres actividades comerciales ilícitas más lucrativas para el crimen organizado, sólo después del tráfico de armas y de estupefacientes.

Resaltó que la complejidad de la migración en México es un patrón de “vulnerabilidad extrema” para los migrantes, pues si bien la condición de indocumentados acentúa los riesgos frente ese problema, muchas víctimas a nivel internacional cruzan la frontera de manera regular.

Weiss reconoció los avances legislativos en materia de derechos humanos y para el combate de la trata de personas en México, sin embargo, los retos que quedan por enfrentar son enormes, pues los delitos de este tipo ocurren ante nuestros ojos, pero quedan largamente invisible porque “siguen siendo ignorados, desconocidos y subestimados”.

En tanto, la ministra consejera de la Embajada de Estados Unidos en México, Laura F. Dogu, advirtió que no hay que perder de vista que la trata es una grave violación de los derechos humanos y que los gobernantes son los responsables de luchar contra ella.

Por esa razón es indispensable contar con una identificación exitosa de las víctimas, para detener el crimen y cumplir con el protocolo de Palermo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Sin embargo, ningún gobierno lo ha perfeccionado, por lo que si se trabaja para mejorar la respuesta contra el crimen, Estados Unidos colaborará para hacer frente al desafío, aseveró.

Dijo que para su país es de alta prioridad trabajar con el gobierno mexicano en la lucha contra la trata de personas, y especificó que se hace mediante la capacitación de grupos de la sociedad civil, a fin de lograr un acercamiento práctico y directo para mejorar sus misiones en la era digital.

Dogu destacó que con la aprobación de la Ley sobre trata en 2012 y con su reglamento se ha avanzado en el tema, pero reconoció que falta mucho por hacer, especialmente en lo que se refiere a la asistencia y la protección de las víctimas.

Fuente: México, 6 Nov. (Notimex).