La batalla por la audiencia televisiva en Pakistán ha provocado que los niños abandonados se conviertan en el premio en un controversial programa de juegos transmitido en horario estelar en aquel país.
El presentador de televisión Aamir Liaquat Hussain entregó a una niña a una sorprendida pareja durante su programa de siete horas que se transmite en vivo en el mes de Ramadán.
“Me sorprendió al principio. No podía creer que nos habían dado esta niña”, dijo Suriya Bilqees, ahora una madre de una niña de dos semanas de edad. “Yo estaba muy feliz”, aseguró
Otro bebé será entregado a otra pareja en los próximos días.
El presentador del programa ha sido descrito como un erudito religioso, estrella de televisión e incluso un símbolo sexual. Su embriagadora mezcla de religión y entretenimiento a menudo es seguida por la controversia.
“En Navidad hay Santa Claus que da regalos a todos, eso es importante para los cristianos. Para nosotros el Ramadán es un tiempo muy especial por lo que es realmente importante hacer feliz a la gente y recompensarla”, dijo Hussain.
Su espectáculo Aman Ramazan es una versión paquistaní del programa estadounidense The Price is Right (Atínale al Precio, en México), en donde las 500 personas de su audiencia reciben premios a cambio de responder a las preguntas sobre el Corán.
Los premios pueden ser motocicletas, hornos de microondas, lavadoras o refrigeradores.
El presentador paquistaní también cocina mientras los hombres cantan himnos islámicos y discute de religión con los niños en un jardín lleno de conejos, serpientes y cabras.
Los bebés que se regalaron en el programa fueron encontrados por una organización civil, la Asociación para el Bienestar Chhipa, la cual recibe hasta 15 bebés abandonados al mes.
“Nuestro equipo se encuentra a los bebés abandonados en la calle, en los contenedores de basura –algunos de ellos muertos–, otros mutilados por los animales ¿Por qué no garantizarle al bebé una vida decente y conseguirle un buen hogar?”, dijo Ramzan Chhipa, quien dirige la organización.
“Nosotros no solo regalamos a bebés que han sido encontrados lejos. Tenemos nuestro propio procedimiento para investigar los antecedentes. Esta pareja ya estaba registrada con nosotros y habían tenido cuatro o cinco sesiones”, agregó.
Sin embargo, la pareja no sabía que les darían un recién nacido cuando fueron invitados a participar en el programa de televisión. Ningún trámite de adopción fue hecho antes de la transmisión en vivo.
La adopción no es reconocida oficialmente en Pakistán y no hay ley de adopción. La pareja tendrá que solicitar la tutela en un tribunal familiar.
Algunos espectadores elogiaron que el bebé fuera dado como regalo dentro del programa, pero otros declararon que es un truco publicitario.
“Pakistán despierta”, escribió un ciudadano de nombre Shamim Mahmood en la página Facebook de la organización civil. “Los bebés no son trofeos para ser entregados a cualquiera”, señaló.
Hussain dice que no es un truco para ganar audiencia durante el mes sagrado islámico. Él cree que su espectáculo unifica a una nación fracturada, plagada por la violencia sectaria, la intolerancia religiosa y el terrorismo.
“Estos son los niños que crecen privados de sus derechos a ser niños en la calle y son utilizados para los ataques suicidas con bombas. Hemos tratado de mostrar una alternativa”, dijo.
“Le decimos a la gente que tome a estos niños de la basura en las calles, que los críe y hacerlos ciudadanos responsables, no para destruir a la sociedad a través del terrorismo”, dijo.
El programa ha demostrado ser extremadamente popular, rompiendo récords de audiencia y la posibilidad de que continúe después del Ramadán. El presentador paquistaní planea otro programa para las minorías hindús, sikh y comunidades cristianas.
“Hemos creado un símbolo de la paz y del amor, que es el tema de nuestro programa, para difundir el amor que estoy dando como un ejemplo de esperanza para una pareja sin hijos y un niño abandonado”, dijo Hussain.
CNN