Cuando sientes que te arde al ir al baño o sientes unas ganas incontrolables de ir al baño aunque acabas de ir, es muy seguro que tienes una infección urinaria. Básicamente es una infección bacteriana que sucede con mayor frecuencia en la vejiga.
Como si no fueran suficiente los síntomas, quizá te has puesto a pensar si puedes tener sexo cuando tienes una infección urinaria. Aquí te respondemos esta duda:
¿Puede el sexo empeorar la infección?
Olvídate del sexo por ahora, esa es la realidad. La infección puede ir de malo en peor. El sexo puede agravar la infección al reintroducir las bacterias que causaron la infección desde un inicio.
Además, el sexo con una infección urinaria puede que no se sienta nada placentero. De hecho, puede ser muy doloroso. La vejiga se encuentra justo arriba de la vajina y cualquier presión puede doler cuando está infectada.
¿Puedes transmitirle la infección a tu pareja?
No, no son contagiosas las infecciones urinarias. Muchas enfermedades de transmisión sexual son erróneamente diagnosticados como infecciones urinarias, así que uno puede pensar que su pareja la contagió una infección urinaria cuando en realidad se trata de una ETS.
¿Cuándo puedes volver a tener sexo?
Primero trata tu infección. Tu doctor puede hacerte una prueba de orina para confirmar la infección. A base de los resultados te recetará un antibiótico. Una vez completado el tratamiento y ya no tienes síntomas, es probable que ya sea seguro para que vuelvas a tener sexo. Normalmente toma una semana esto.
Pero si terminaste con los antibióticos y aún sientes el ardor durante el sexo, es señal de que no se ha curado completamente la infección.
¿Cómo evitar que esto vuelva a suceder?
Para empezar, nunca tengas sexo vaginal justo después de tener sexo anal. También vale la pena pedirle a tu pareja que evite cualquier roce con la área anal durante el sexo, lo cual podría causar una infección.
Si eres susceptible a las infecciones urinarias, habla con tu ginecólogo sobre pastillas de arándano que pueden evitar que la bacteria del E. coli llegue a la vejiga.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.