¿Nunca te ha pasado que agarras algo de la cocina, le das una mordida, pero justo antes de que tragues, ves lo que tienes en las manos está cubierto de hongos? ¿Qué haces en este momento, lo escupes o te lo tragas?
Pues en realidad no es la gran cosa, pero si hay raras ocasiones donde te puede enfermar esto.
¿Qué pasa si comes algo podrido?
No te va a matar y lo vas a digerir igual que cualquier cosa con tal de que tus defensas no tengan un problema.
El moho, o los hongos microscópicos, pueden aparecer en cualquier producto vegetal o animal tras ser transportado por el aire, agua o insectos. Pueden ser peligrosos, pero no lo suelen ser. Hasta ciertos alimentos, como algunas carnes curadas o ciertos quesos, los tienen intencionalmente.
¿Pero qué de ese moho verde o blanco que aparece en verduras? Puede causarte nauseas, pero esto sería causado por el asco que te daría, no por alguna toxina en particular.
Antes de llamar al doctor, espera para ver si la nausea no se vuelve algo peor. La mayoría de los hongos o bacterias no sobreviven en el estomago.
¿Pero qué pasa si sí te enfermas?
No es muy común y es probable que si te enfermas es por consumir grandes cantidades de un hongo no tóxico. Los síntomas incluyen nausea y vomito persistente, en estos casos acude al doctor.
En otros casos podrías desarrollar una reacción alérgica a ciertos hongos y hasta podrías desarrollar problemas respiratorios.
¿Pero qué si cortas la comida para quitarle los hongos?
Depende del alimento. Ciertos hongos tienen “raíces” que invaden la comida, aunque solo alcances a ver los pelitos blancos en la superficie. Estas raíces permiten que toxinas se esparzan por todo el alimento por dentro, así que es mejor tirar la comida aunque sólo veas que esté afectada en una parte.
Algunos quesos duros, carnes frías, frutas firmes y verduras aún pueden comerse ya que es más difícil que el hongo penetre profundamente. Aunque no son más sanos estos hongos.
Estos alimentos están bien comerse si les quitas los hongos, pero deberías de evitar comer quesos suaves, frutas suaves, cualquier tipo de pan, legumbres, nueces, yogurt o carne si les encuentras hongos. Mejor tíralos a la basura aunque se sienta como un desperdicio.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.