No es un secreto, existe muchísima energía a unos kilómetros debajo de la superficie de la Tierra. Para aprovechar cualquier cantidad de la energía geotérmica del planeta para energía de vapor, podríamos hacer un hoyo de más o menos 2 km en la corteza de la Tierra. Desafortunadamente, el proceso de taladro es increíblemente caro para cualquier interesado, desde $5 millones hasta $20 millones de dólares, dependiendo de la profundidad.

Mark Russell, CEO de Hypersciences quiere cambiar justamente eso. Su método implica disparar proyectiles dentro de la corteza de la Tierra, lo cual dice que sería diez veces más rápido que un taladro tradicional.

Este proceso funciona al cargar un proyectil con un núcleo especial abrasivo dentro de un acelerador que sirve tanto como la cámara y el cañón de este “cañón de corteza.” El diseño bombea gases dentro del acelerador, los cuales luego se encienden, creando presión dentro de la cámara conforme pasa el proyectil. Esto lanza al proyectil al suelo a casi 2km/s, a esta velocidad cualquier roca o sedimento en el camino queda completamente pulverizado y los escombros salen del hoyo.

El proyectil es bastante general en el patente, pero Russell dice que podría estar cargado con explosivos plásticos en la punta para darle más poder de taladro. Otra opción podría ser ponerle sensores para medir la temperatura y profundidad exactas.

El acelerador dispara una y otra vez con múltiples proyectiles hasta que la profundidad deseada se logre. Esta técnica puede ahorrar mucho dinero por las herramientas y el desgaste que suele requerir un taladro tradicional. Sin embargo, hay mucha discusión sobre cómo funcionaría esta tecnología en la práctica y qué efectos tendrían estos impactos en el ambiente subterráneo, el agua subterráneo y la geología.

Se dice que una estación geotérmica en sus niveles máximos podría brindar energía sustentable para 41,000 hogares.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.