Recibe mexicana premio de la ONU, Martha Isabel Ruiz Corzo, conocida como “maestra Pati”. Recibió el más importante premio de ecología de la ONU por su labor en la Sierra Gorda, ofreció compartir sus recetas ambientales que desarrolló en más de 30 años de labor.
“Estamos llenas de recetas para ayudar a otras comunidades en el mundo a mitigar el cambio climático y a reducir la pobreza mediante esquemas participativos”, dijo Ruiz Corzo.
La mexicana recibió el premio “Campeones de la Tierra 2013” en una ceremonia celebrada el miércoles por la noche en Nueva York, por la labor que realiza en la Siera Gorda de Querétaro.
Entrevistada por Notimex, la activista destacó que en 30 años de labor ha desarrollado “un laboratorio vivo de prácticas ambientales”.
En ese laboratorio se ha probado y tropicalizado mecanismos ecológicos de todo tipo, incluyendo el Protocolo de Kyoto, con el fin de proteger la sierra queretana, explicó.
El premio “Campeones de la Tierra” lo otorga el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), y es considerado como la mayor distinción del sistema de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para la labor ambiental.
La ONU consideró que la reserva de la Sierra Gorda es un modelo de manejo público y privado de un ecosistema, ya que se practica el ecoturismo, el manejo de desechos y proyectos de conservación, que sirven además para generar recursos a los miembros de la comunidad.
Ruiz Corzo, directora del Grupo Ecológico Sierra Gorda, confió en que el premio de la ONU le dé mayor visibilidad a su lucha y que el mecanismo de compensación de carbono forestal, que gracias a su labor se aplica en Querétaro, se extendienda a otros estados del país.
Manifestó que tras aplicar las “laberínticas reglas” del Protocolo de Kyoto en la Sierra Gorda logró obtener un estándar dorado para acceder al mercado de carbono, pero que organismos de menor tamaño podrían tener una enorme dificultad para implementar tales regulaciones.
Consideró que antes de hablar de sustentabilidad es necesario conservar los recursos naturales que ya se tienen.
Así como evitar la tala hormiga, los incendios provocados y las amenazas a quienes habitan los bosques con el fin de generar un valor económico para ellos por los servicios ambientales naturales.
Ruiz Corzo señaló que la peor amenaza para la Sierra Gorda no proviene de la acción directa de parte de taladores o del crecimiento poblacional, sino de la multiplicación de los efectos del cambio climático.
“La peor amenaza es el cambio climático porque, aunque humanamente hacemos lo que podemos para proteger la naturaleza, cuando no llueve el bosque se debilita y sin heladas las plagas proliferan. Hemos perdido muchos bosques por esas plagas. Y lloro en mi desespero”, enfatizó.
Fuente: Naciones Unidas, 19 Sep (Notimex).