Al menos 21 niños han muerto a causa de la influenza en Estados Unidos y la enfermedad sigue en aumento con tintes epidémicos por el país, dijeron hoy autoridades del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) con sede en Atlanta, Georgia.

Un total de 24 estados y la ciudad de Nueva York se encontraban en los niveles más altos de la enfermedad en la semana que terminó el 5 de enero, de acuerdo con la institución, pero la gripe generalizada ya se registraba en 47 estados.

Con niveles altos de influenza son cinco estados menos que la semana anterior, lo que sería una esperanza de que la epidemia comenzó a disminuir en los estados con menor actividad. La semana anterior se reportaron 18 menores muertos.

“Puede estar disminuyendo en algunas áreas, pero eso es difícil de predecir”, dijo en conferencia telefónica con la prensa el director de los CDC, Dr. Thomas Frieden, al señalar que en las próximas dos semanas podrán tener mayor certeza de si la enfermedad ya alcanzó su tope para la temporada.

Las vacunas contra la influenza pueden aplicarse en centros y clínicas de salud, en hospitales y en farmacias convencionales con o sin seguro médico.