La forma más fácil de terminar con una discusión o una pelea con tu pareja es subirte a una máquina de tiempo. Pero no usarías esta máquina de tiempo para regresar al pasado para impedir que suceda la pela desde un inicio (aunque eso estaría increíble), sino que para ver el futuro.
Según un nuevo estudio que le pidió a 500 personas que pensaran en un conflicto sin resolver entre ellos y su pareja o un amigo cercano.
Los participantes que imaginaron cómo se sentirían sobre el pleito dentro de un año eran más propensos a reinterpretar el conflicto, ser un poco más indulgentes y evitar echarle la culpa a otros que aquellos que sólo pensaron en cómo les hacía sentir el conflicto ahora. Su perspectiva cambia, básicamente.
Si te está saliendo humo de la cabeza después de una pelea con tu pareja, deberías de dar un paso hacia atrás y considerar las consecuencias de tu guerra verbal a la larga.
Estas enojado e irritado ahora, pero hay mucho más detrás de tu relación que una sola noche mala de discusiones. Una pelea no determina el resto de sus vidas.
También puede funcionar con peleas que llevan tiempo. Imagínate que el conflicto se prolongue otro año de lo que ya lleva, esto podría forzarte a hacer enmiendas más pronto que tarde. Cuando piensas en el futuro en lugar de guardar rencores y no dejar de pensar en la pelea en el momento, es más probable que trates el argumento como una experiencia de aprendizaje y podrás seguir adelante.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.