[sws_blockquote align=”right” alignment=”alignright” cite=”” quotestyles=”style02″]El sistema se diseñó para sustituir a la selección manual, que puede ser peligrosa y con frecuencia es sumamente costosa. [/sws_blockquote]
Un sistema robótico de reciclaje podría ayudar a resolver el creciente problema de los desechos en todo el mundo, según la empresa finlandesa de tecnología ZenRobotics.
El Reciclador ZenRobotics (ZRR) es un sistema robótico inteligente que separa los materiales de construcción en una banda transportadora, retira aquellos que son reciclables y los deposita en contenedores de recolección. El sistema se diseñó para sustituir a la selección manual, que puede ser peligrosa y con frecuencia es sumamente costosa.
Se cree que los sectores de la construcción y la demolición contribuyen con una tercera parte de todos los desechos a nivel mundial. Tan solo Estados Unidos produce la impresionante cantidad de 325 millones de toneladas de desperdicios al año y Gran Bretaña genera otros 120 millones.
Aunque los desperdicios domésticos y municipales se han reducido en los últimos años en el mundo desarrollado, Waste Watch —una organización no lucrativa de Gran Bretaña— indica que más del 80% de los desechos humanos que podrían reciclarse acaban en un relleno sanitario.
El fundador de ZenRobotics, Jufo Peltomaa, señala que el problema también es grave en la Unión Europea: “Por lo menos en esta región se generan 900 millones de toneladas de desechos de construcción y demolición. Eso sería equivalente a una fila de autos medianos que daría 45 vueltas al planeta”.
Peltomaa y su equipo en ZenRobotics construyeron el ZRR para lidiar con este problema. “En realidad es un trabajo difícil para los robots y los sistemas de aprendizaje automatizado”, dice Peltomaa. “Actualmente no hay algo parecido en el mundo, así que el nuestro es el primero”.
[sws_blockquote align=”right” alignment=”alignright” cite=”” quotestyles=”style02″]Peltomaa dice que de inmediato notó dos cosas: “Primero, que es realmente peligroso estar allí porque el procedimiento es muy peligroso (y) segundo, que la tecnología que teníamos era ideal. Así que decidimos incursionar en la selección robótica de residuos”. [/sws_blockquote]
El ZRR identifica los distintos tipos de desechos por medio de un proceso llamado “fusión de sensores”. Al analizar la información, los sensores seleccionan objetos en una banda transportadora y los distribuyen a través de conductos cercanos. El sistema de fusión de sensores recurre a varias tecnologías como medición de peso, barrido en 3D, análisis táctil y por medio de espectrómetro (que mide cuánta luz reflejan los diferentes materiales).
El equipo de ZenRobotics cree que su creación ayudará a aligerar el peligroso y repetitivo trabajo de filtrar los desechos, que actualmente se hace a mano.
“Actualmente, los trabajadores seleccionan a mano los desperdicios de la construcción y la demolición”, dice Peltomaa. “Esa es una solución muy buena, pero es peligrosa para la salud. Hay materiales tóxicos, afilados y pesados, además de asbesto, entre otras cosas”.
Peltomaa dice que se le ocurrió usar robots para reciclar cuando veía un documental del Discovery Channel en el que trituraban y reciclaban un bombardero B52. Unos empleados “que lucían aburridos” seleccionaban los materiales entre los desechos que circulaban en una banda transportadora.
Peltomaa dice que de inmediato notó dos cosas: “Primero, que es realmente peligroso estar allí porque el procedimiento es muy peligroso (y) segundo, que la tecnología que teníamos era ideal. Así que decidimos incursionar en la selección robótica de residuos”.
El sistema de fusión de sensores del ZRR funciona por medio de un procedimiento complejo de análisis que se ejecuta una vez que los artículos se colocan en la banda transportadora. Los sensores del sistema reúnen información que posteriormente es enviada al sistema de inteligencia artificial nombrado por el equipo “Cerebro ZenRobotics”.
El cerebro evalúa el material del que está hecho cada objeto (madera, metal, piedra, etc.) y decide qué hacer con él. Luego, se envían instrucciones al brazo robótico, que recoge los objetos y los deposita en el contenedor adecuado, listos para su recolección.
El conocido diseñador industrial, Stefan Lindfors, piensa que el robot podría colaborar a los esfuerzos que se llevan a cabo en todo el mundo para optimizar la manera de reciclar, aunque agrega que el verdadero problema es algo mucho más elemental: “para empezar debería haber menos desechos”.
Lindfors dice que los inventos como el robot ZRR suscitan interrogantes acerca de los desechos mundiales: “Los seres humanos tenemos mucho en qué pensar: cómo empacamos las cosas, cómo las envolvemos y cómo usamos los materiales”.
CNN