El gobierno de Siria sitia y asedia ciudades enteras como método de guerra, impidiendo la distribución de alimentos y medicinas entre la población civil, denunció la Comisión de Investigación de Naciones Unidas sobre Siria (CoI).

“Las fuerzas del gobierno siguen empleando asedios como método de guerra??, afirmó el presidente de la CoI sobre Siria, Paulo Pinheiro al presentar al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra una actualización sobre los últimos hallazgos de sus investigaciones.

Principalmente, las fuerzas del gobierno comandadas por el presidente sirio Bashar al Assad asedia las zonas de Al Ghouta en Damasco, lugar en donde se alega el ataque de armas químicas del 21 de agosto que provocó la muerte de cerca de mil 5oo personas incluyendo niños.

Asimismo, asedia ciudades como Nawa en Deraa y los puestos de control del ejército impiden el flujo de alimentos , agua, combustible y medicinas en estas áreas , con consecuencias devastadoras para la población civil en el interior.

“Los sitios a poblaciones enteras violan los derechos fundamentales y no derogables a la salud , la vida , la alimentación y la dignidad humana de las poblaciones atrapadas”, afirmó Pinheiro.

Además, agregó, los desplazados internos que huyen de las áreas de alto riesgo , como la ciudad de Homs , son particularmente vulnerables .

Miles de personas que huyen son acechados por los bombardeos, que también corren el riesgo de ser detenidos arbitrariamente y recluidos ilegalmente en los controles gubernamentales .

En las provincias del sur, se ha producido un aumento de los ataques -incluyendo asesinatos ilegales – principalmente en las comunidades de beduinos , percibidos como leales a la oposición armada.

Pinheiro subrayó que continúan intensos bombardeos aéreos contra zonas densamente pobladas, lanzan bombas incendiarias e incluso municiones en racimo, especialmente en Idlib.

Como ejemplo, Pinheiro narró sus entrevistas con sobrevivientes de un ataque a una escuela en Awram al- Koubra , en Aleppo del 26 de agosto pasado con una bomba incendiaria que cayó de un avión de combate del régimen sirio.

En el incendio que siguió, ocho estudiantes murieron inmediatamente. Otros cincuenta , entre los 14 y 17 años de edad, sufrieron terribles quemaduras hasta en un 80.0 por ciento de sus cuerpos.

Se espera que muchos de ellos no sobrevivan, lamentó Pinheiro quien hizo hincapié en que no hay evidencia de combatientes de la oposición u objetivos legítimos cerca de esa escuela.

“Los niños constituyen una gran proporción de bajas civiles. Han sido detenidos arbitrariamente y torturados”, agregó.

Por otra parte, las fuerzas del gobierno siguen lanzando ataques contra el personal médico y los hospitales, tal como se detalla en el informe: “Asalto de la atención médica en Siria “, presentado la semana pasada.

“La denegación discriminatoria del derecho a la salud como un arma de guerra ha sido una característica escalofriante de este conflicto”, sostuvo.

Ataques a hospitales se han producido en fecha tan reciente como el pasado día 12 de septiembre, cuando los aviones del gobierno atacaron un hospital de campaña cerca de la ciudad de Alepo, reveló .

El informe también detalla los crímenes de guerra perpetrados por grupos armados opositores, los que se asimilan a la crueldad y naturaleza de los cometidos por el gobierno , pero en menor escala.

Para la CoI el hecho de no lograr una solución política ha permitido que el conflicto no sólo se haya profundizado en su intransigencia , sino también se ha ampliado hacia nuevos actores de crímenes inimaginables.

“Ni la ley ni la decencia ha restringido el comportamiento de las partes”, señaló.

Estados influyentes tienen la obligación de garantizar que las partes en el conflicto cumplan con las leyes de la guerra, abundó Pinheiro.

Los suministros de armas a todas las partes han permitido la escalada del conflicto, y con ello, el peligro que enfrentan los civiles .

Las transferencias de armas no debería ocurrir cuando hay un riesgo real de que se utilicen para cometer crímenes de lesa humanidad, y violaciones del derecho internacional humanitario , o crímenes de guerra .

Pinheiro consideró que el conflicto se ha convertido en una trágica realidad en donde se utilizan “métodos aterradores” contra los civiles.

Pese a las evidencias presentadas, el embajador de Siria, Faysal Khabbaz Hamoui los hallazgos de la CoI de la ONU y lamentó que los expertos hayan caído en un “laberinto de falsas informaciones”.

Fuente: Ginebra 16 Sep (Notimex).