El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomendó a las futuras madres mayores de 40 años dar seguimiento clínico del embarazo de forma regular y puntual, así como medidas higiénico dietéticas y ejercicio adecuados a su estado, a fin de que la gestación transcurra de forma normal.

El jefe de Ginecología del Hospital General de Zona 2A Troncoso, del IMSS, Gerardo Tinoco Jaramillo, señaló que el embarazo en mujeres de esa edad requiere de cuidados especiales a fin de no exponer la vida de la madre ni la del bebé, por lo que es necesario acudir con el médico obstetra para un adecuado control prenatal.

Explicó que durante la maternidad siempre existe riesgo de sufrir complicaciones que se incrementan con la edad, por lo que después de los 40 años un embarazo es considerado de alto riesgo.

A ese grupo de derechohabientes se les aconseja tomar ácido fólico tres meses antes de la gestación, tener buena condición física, llevar a cabo control de enfermedades preexistentes y acudir a sus Unidades de Medicina Familiar para solicitar consejería pre-gestacional, subrayó.

Lo anterior, ante la posibilidad de que el bebé pueda nacer con problemas o que la madre tenga alguna complicación, detalló en un comunicado.

Indicó que los factores de riesgo que toman en cuenta los especialistas son con base en los antecedentes clínicos de cada persona, pues al llegar a la cuarta década de vida disminuye la fertilidad.

Se presentan con mayor frecuencia enfermedades como diabetes e hipertensión arterial, así como riesgo de cromosomopatías (alteraciones genéticas) en los recién nacidos, mencionó.

Tinoco Jaramillo advirtió que la mujer debe saber que el embarazo es una situación demandante física y emocionalmente.

Entre los cambios que le ocurrirán, dijo, se encuentran el aumento del volumen sanguíneo, anemia del embarazo, incremento de la frecuencia cardiaca, restricción de la capacidad pulmonar, cambios en el sistema gastrointestinal y en la piel, entre otros.

De esta forma, recomendó a las futuras madres llevar el control de enfermedades preexistentes o de reciente aparición, así como el seguimiento clínico del embarazo de forma regular y puntual; medidas higiénico dietéticas y ejercicio adecuados a su estado, con el fin de que la gestación transcurra de forma normal.

México, 23 Feb. (Notimex).