Si lo piensas un poco, las películas de Mi Pobre Angelito están un poco dañadas. Claro, Kevin McCallister, el protagonista, es adorable y siempre cae en sus pies, pero que tu familia se olvide de ti dos veces y te dejan atrás durante las vacaciones antes de que ni cumplas 10 años seguro te causará algún daño emocional.

Pero no sólo fue abandonado por su familia, sino que encima de todo, tuvo que proteger su hogar de dos criminales, y aunque eran unos ineptos, amenazaron con quitarle las uñas a mordidas. Si eso no traumaría a un niño de casi diez años, no sé qué lo logre.

Y olvidate de la familia, el pobre de Kevin tuvo que soportar la locura de su familia regularmente, tolerando ser el desquite de todos por sus problemas o en general, si alguien estaba pasando un mal día, lo usaban a él para aliviar el estrés.

Así que probablemente Kevin no creció en un hogar muy bueno y no nos sorprendería si este pobre angelito termine mal algún día. De hecho, esto es justo lo que puedes ver que pasa después de tanta negligencia y abuso a lo largo de su infancia:

Publicado por Othón Vélez O’Brien.